500 familias de la urbanización Santa Rosa Plaza III, situada en la carretera vieja Charallave-Ocumare, protestaron ayer por tener dos meses sin recibir el vital líquido
Desde las 3 de la madrugada de ayer, más de 500 familias de la urbanización Santa Rosa Plaza III, situada en la carretera vieja Charallave-Ocumare, municipio Tomás Lander, protestaron por tener dos meses sin recibir agua.
Los vecinos cerraron la autopista Charallave-Ocumare, en ambos sentidos, y la carretera vieja, generando un gran caos vehicular, hasta las 11 a.m. Los usuarios del transporte público tuvieron que hacer trasbordos y los conductores de vehículos particulares tomaron vías alternas como Santa Bárbara y Colonia Mendoza, tardando más de una hora para llegar a Charallave, Cúa u Ocumare.
Los lugareños, enardecidos por la falta de respuesta de las autoridades locales, tenían pancartas con consignas como “queremos agua dulce, no salada”, en reclamo a que el líquido que reciben no es apto para el consumo humano y exigían que fuera potable.
Liliana Sánchez, vecina de Santa Rosa Plaza III, indicó que la bomba del pozo salado, de donde le suministran agua, se quemó y aún no la han reemplazado. “Esa agua no sirve ni para bañarse, muchos menos para tomarla, porque es salada, pedimos que sea tratada, pues aquí no vivimos animales, sino seres humanos”, dijo.
Agregó que en los tres años que tienen habitando el urbanismo han gastado un dineral para abastecerse. “200 Bs., nos cobran para llenarnos un tanque de cilindro, 20 Bs., por un tobo, 80 Bs., por un pipote y un botellón de agua cuesta 45 Bs., y ese gasto es diario, sin contar que aquí viven muchas personas discapacitadas que deben cargar los ‘peroles’ hasta el cuarto piso”, comentó Arelis Vásquez.
Sánchez apuntó que están incluidos en el proyecto del acueducto que pasa por la autopista Charallave-Ocumare, pero no ven el día que pueden tener este importante recurso a través de tuberías.
A la protesta llegó Julio César Marcano, coordinador de infraestructura de la Alcaldía de Tomás Lander y dialogó con los vecinos, igualmente se hicieron presentes voceros de Hidrocapital.
Los representantes gubernamentales acordaron con los residentes de Santa Rosa Plaza III, la reparación del motor de la bomba y se estima que para hoy esté lista. Además habilitaron camiones cisternas durante el día para abastecer a los residentes, según informó Noel Espinoza, promotor comunitario de Hidrocapital.
Más problemas
Además del grave problema con el suministro de agua, los vecinos tienen fallas con el servicio eléctrico, el cual es deficiente. Las torres 20, 24 y 26 están cediendo y en el urbanismo no hay escuelas ni un ambulatorio de salud. “Nos prometieron ‘villas y castillas’ y no cumplieron, queremos soluciones”, dijo la vecina Sandra Chirinos.
MIP-TUY Agencia/Milagro Castillo
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