El slugger venezolano podrá jugar con los Rojos del Águila de Veracruz mientras se lleva a cabo el proceso judicial incoado por sus abogados
El conjunto de los Rojos del Águila de Veracruz reinsertarán al slugger venezolano Álex Cabrera en su róster, mientras se lleva a cabo el proceso judicial incoado por los abogados del pelotero, que pusieron en duda el proceso con el cual se le acusó de uso de esteroides, alegando mala manipulación de las pruebas por parte de la Comisión Nacional de Cultura, Física y Deporte (Conade).
La Comisión de Apelación y Arbitraje del Deporte (CAAD) recibió la reconsideración de los abogados del venezolano y dictaminó que debe ser renganchado mientras continúan con el proceso.
El gerente deportivo del conjunto rojo, Grimaldo Martínez, confirmó la información. «Recibimos esta notificación del juez de manos de los abogados de Álex», indicó el ejecutivo. «Es un caso parecido al de Álex Rodríguez (de Biogenesis). Por lo tanto, vamos a cumplir con la orden», dijo el ejecutivo en declaraciones publicadas por el portal web del diario El Universal. El venezolano debería estar en el róster del conjunto el próximo martes.
Cabe destacar que hay un punto pendiente en lo que se refiere a la reinclusión del toletero oriental, por cuanto la fecha límite para hacer movimientos con importados culminó la noche del martes.
«Ese es otro tema que tenemos que resolver», reconoció Martínez. «Es un caso extraordinario, inédito, y se llevará a Asamblea para tratarlo. Ya le notificamos a la liga la medida del juez».
«El Samurai» fue nombrado el pasado jueves 24 de abril en una lista de jugadores que dieron positivo de acuerdo a un procedimiento que se rige por los parámetros de la Major League Baseball en relación con el Programa de Prevención y Uso de sustancias no permitidas y de la Agencia Mundial Antidoping (World Anti-Doping Agency en sus siglas en inglés) en lo que se refiere al procedimiento en la toma y procesamiento de las pruebas.
La muestra «B» ratificó, el 7 de mayo pasado, el mismo resultado de la prueba «A», por lo que había quedado marginado del circuito mexicano de verano.