En el Hospital Luís Razetti sin insumos para atender pacientes oncológicos, mientras que en el Domingo Luciani carecen con el personal adeudado, denuncian médicos
Aún cuando el Ministerio de Salud prometió reubicar a los pacientes del Instituto de Hematología y Oncología de la Universidad Central de Venezuela de manera temporal a otros tres centros hospitalarios, el Domingo Luciani, el Luís Razetti y el Padre Machado, esto no fue cumplido a totalidad.
“El Ministerio de Salud prometió que traería unos autobuses para llevar a los pacientes que necesitaban quimio a otros hospitales para ser atendidos”, dijo Mauro Zambrano, dirigente sindical del Clínico Universitario.
Por lo que los médicos del centro decidieron reanudar el suministro de quimioterapia en el patio del instituto con los pacientes sentados en sillas de espera, a falta de mejores instalaciones.
“Nunca llegaron las unidades para trasladar a los pacientes con cáncer. Empezamos a colocar la quimioterapia en el patio de IHO de la UCV”, escribió a través de su cuenta en redes sociales, José Manuel Olivares.
“Los médicos decidieron hacerlo así para evitar que los usuarios pierdan los ciclos de tratamiento. La quimioterapia debe administrarse de acuerdo con un esquema que no se debe interrumpir”, explicó Aixa Müller, médico homeópata del IHO. Según explicó el Dr. Cesar Jiménez, oncólogo pediatra, de realizarse el ciclo de quimioterapias de forma intermitente se corre el riesgo de que se produzca metástasis o reaparezca el cáncer en paciente en fase de recuperación, razón por la cual, personal médico y administrativo volvió a cerrar el Instituto, mientras se analizan futuras acciones.
La decisión de remitir a los pacientes a otros centros de salud, anunciada luego de tres horas de reuniones entre médicos del Instituto y Nuramy Gutiérrez, coordinadora nacional del Sistema de Atención Oncológica del Ministerio de Salud, fue rechazada por los pacientes que reclamaron que el despacho de salud haya abandonado las necesidades del centro. Alegaban que por la delicada condición de salud, ello pudiese acarrear complicaciones.
La institución se declaró en cierre técnico la semana pasada por falta de insumos y fallas de infraestructura que no periten suministrar los cuidados necesarios a los más de 50 pacientes que van a recibir tratamiento contra el cáncer en sus instalaciones diariamente.
Sin lugar a dónde ir
Müller comentó que el Complejo Hemato-Oncológico y de Radioterapia del hospital Domingo Luciani, ubicado en el municipio Sucre, uno de los tres centros a los que serían referidos los pacientes, recalcó que no podía recibir a los 50 pacientes que serían trasladados en autobuses a partir del lunes 21 de julio.
“Es muy difícil lograr esos traslados de un momento a otro”, afirmó. “El Llanito tiene un servicio nuevo, pero le falta personal, hay mucho espacio, sillones, farmacia, sala de mezclas de quimio, pero faltan los médicos y las enfermeras”.
Ni el Luís Razetti, ni el Hospital Padre Machado tampoco recibieron pacientes del IHO. “No tienen dónde llevar a esos pacientes, muchos de ellos están en condición delicada”, dijo Zambrano. “Los quieren llevar a otros centros de salud, pero ellos tampoco están en condiciones optimas: en El Llanito ya dijeron que no los pueden recibir y el Razetti está colapsado”.
Hace 15 días los trabajadores del Oncológico Luís Razetti denunciaron en una asamblea extraordinaria que el servicio de Emergencias del centro no disponía de materiales. Señalaron además que carecían de suministros básicos como mascarillas, inyectadoras y catéteres.
En contra del cierre
Según denuncia personal obrero del Instituto, la inacción de las autoridades de la cartera de salud se debe a una intención de cerrar el servicio, uno de los tras más importantes especializados en la lucha contra el cáncer en Caracas.
“El ministerio no quiere reconocer que desde el año de 1980 tiene un convenio firmado con la Universidad Central que le obliga a pasarle una partida presupuestaria al Instituto”, dijo Zambrano, “tanta indolencia solo se explica porque quieren cerrar el Instituto, sin importarles el futuro de los pacientes”.
“Colapsados”
Mauro Zambrano, “La Dra. Nuramy Gutiérrez prometió que vendrían autobuses para llevar a los pacientes a otros centros de salud, pero al final nunca vinieron”
José Manuel Olivares, “El Gobierno no tienen capacidad de mover a estos pacientes, los demás hospitales del país también están colapsados”
Aixa Müller, “La quimioterapia debe administrarse de acuerdo con un esquema que no se debe interrumpir”
Luís Guillermo Valera
@LuisGValera
Fotos: Giovanni Martínez
