El arresto y la liberación del general y exjefe de inteligencia militar venezolano Hugo Carvajal en Aruba este fin de semana es un nuevo episodio en una larga historia: aquella de la relación entre Venezuela y Holanda.
Tres islas del Caribe colonizadas por Holanda -Aruba, Curazao y Bonaire- están a pocos kilómetros de Venezuela.
Las islas adquirieron diversos grados de autonomía entre 1978 y 1986, pero la influencia política, económica e incluso cultural de Holanda en ellas se mantiene hasta hoy.
Aruba es un territorio autónomo dentro del Reino de Holanda, que maneja las relaciones internacionales de la isla.
Por eso el altercado que significó la fallida designación como cónsul de Venezuela en Aruba de Carvajal, quien es acusado por la justicia de Estados Unidos de narcotráfico, se convirtió en un asunto de Estado para Holanda.
La decisión sobre su liberación fue tomada por el mismo gobierno holandés, que al reconocer su inmunidad como diplomático desestimó la petición de arresto con fines de extradición que había presentado EE.UU..
Holanda dijo haberse basado exclusivamente en el argumento de la inmunidad diplomática para dejar libre a Carvajal.
Antes y despues de la decisión, se viene discutiendo en medios acerca del impacto que hubiese podido tener un eventual agravamiento de la controversia entre Holanda y Venezuela por el caso de Hugo Carvajal, sobre los negocios y otros aspectos de las relaciones entre esos dos países
BBC Mundo examina algunas de las dimensiones de esa relación bilateral.
Gestor de la industria petrolera
Carvajal fue recibido por Maduro el domingo como un «patriota».
Las trasnacionales holandeses fueron importantes inversionistas en Venezuela desde que nació la industria petrolera en el país sudamericano, a comienzos del siglo XX.
La petrolera holandesa Shell estuvo involucrada en el desarrollo de los primeros pozos petroleros y, posteriormente, de las refinerías.
La Refinería Cardón, que está hoy en el complejo petrolero más grande de Venezuela en Amuay, fue construida en 1950 y operada hasta la nacionalización del petróleo en 1976 por los holandeses.
Shell hoy mantiene negocios en Venezuela como prestador de servicios petroleros.
Distanciamiento
Por otro lado, la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) tenía una refinería en Aruba, que ahora está cerrada, y otra en Curazao, que está alquilada.
«Al ser (la ciudad holandesa de) Rotterdam el principal puerto petrolero para Europa durante años, Holanda siempre jugó un rol importante en Venezuela», dice el internacionalista venezolano Carlos Romero.
Pero a pesar de que en junio de 2013 firmaron nuevos acuerdos de cooperación, la relación comercial entre los dos países parece haberse reducido.
«Venezuela y Holanda tienen una relación que no es demasiado cercana, pero es amistosa», dice la economista Bárbara Lira, quien destaca que las importaciones desde Holanda representan actualmente menos de 1% del total, y las exportaciones a Holanda representan menos de 10% del total.
«Por el lado petrolero», añade, «en 2013 a Holanda solo se enviaron 5.000 barriles diarios de petróleo, que es un recorte importante comparado con los 21.000 que se enviaron en 2012».
Fomento de inversiones
Según la analista de Grupo Consulto ODH, «otro de los signos de cordialidad histórica de las relaciones Holanda-Venezuela» es que firmaron en 1991 un Acuerdo de Promoción y Protección para fomentar y proteger las inversiones entre los dos países.
Uno de los negocios que surgió de ese convenio terminó en una dura controversia: bajo el acuerdo, la multinacional estadounidense Conoco Phillips obtuvo, a través de una filial holandesa, propiedades en Venezuela que fueron expropiadas en 2007 por el gobierno del entonces presidente, Hugo Chávez.
La transnacional demandó al estado venezolano por US$66 millones y ganó el caso.
Venezuela rechazó y dijo que apelaría el fallo -de 2012- del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI), pero este año un panel arbitral del Banco Mundial desestimó la solicitud que hizo Venezuela de reconsiderar el fallo.
Turismo
Los cancilleres de Holanda y Venezuela firmaron hace un año nuevos acuerdos de cooperación económica.
Más allá de las relaciones directas entre Venezuela y Holanda, la nación sudamericana es importante para la economía local de Aruba.
En 2012, Venezuela representó el 14% de los 1,2 millones de turistas que fueron a Aruba, según cifras de la Oficina de Turismo de la isla para Latinoamérica.
Eso lo convierte en el segundo país con más turistas en la isla, después de EE.UU..
No obstante, viajar de Venezuela a Aruba se ha vuelto cada vez más difícil: en marzo, una de las aerolíneas de ese país, Tiara Air, anunció reducciones de oferta de boletos de 78%.
De hecho, en medio de la polémica diplomática por la detención de Carvajal el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil venezolano canceló las operaciones entre Venezuela y la isla.
Sin embargo, después los vuelos se reanudaron tras la notificación de la liberación de Carvajal.
BBC Mundo