El rapto de Lino Bassilio, de 33 años de edad, se perpetró en horas de la noche del pasado martes, en el sector La Acequia de Ocumare del Tuy, según fuentes militares
Un ingeniero de origen portugués fue secuestrado en horas de la noche del pasado martes, cuando abría el portón de su residencia, ubicada en la urbanización La Acequia de Ocumare del Tuy. El hombre fue sometido por cinco sujetos fuertemente armados.
De fuentes militares supimos que los extraños dominaron a Lino Bassilio, de 33 años de edad, a quien obligaron abordar la camioneta marca Chevrolet, modelo Luv Dimax, color blanco, doble cabina, la cual tripulaba al momento del suceso. El ingeniero es llamado cariñosamente “Nuno”.
Se supo que el extranjero labora para la empresa “Ring Construcción Madrilense” en el conjunto residencial La Guadalupe, ubicado en la entrada de Ocumare del Tuy. Esta obra se realiza a través del convenio Portugal-Venezuela, como parte de las edificaciones de la Gran Misión Vivienda Venezuela.
Llamó a un amigo…
La versión conocida por el Diario La Voz indica que Bassilio, luego de ser raptado, fue dejado en libertad en el sector El Rodeo de Ocumare del Tuy; zona adyacente al sitio donde ocurrió el secuestro. Una vez libre el hombre caminó hasta la casa de un compañero de labores, a quien le manifestó lo ocurrido. Posteriormente notificaron del hecho a un superior y éste se presentó al sitio. Luego, los tres hombres acudieron a la sede del Cicpc-Tuy, donde formularon la denuncia. Seguidamente fueron al comando de la Guardia del Pueblo y narraron los hechos. Una comisión militar se desplegó en la zona logrando ubicar la camioneta de la víctima en uno de los estacionamientos de la urbanización Casa Blanca de Ocumare del Tuy. Se supo que los investigadores del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro de la Guardia Nacional Bolivariana determinaron que las celdas de los teléfonos celulares de la víctima abrían en la referida residencia.
Es importante destacar que, según fuentes policiales, Bassilio fue dejado en libertad, ya que al parecer no era el objetivo de los delincuentes, quienes pretendían raptar a un comerciante que habita en la misma zona
200 mil bolos
Los investigadores manejan también como hipótesis el robo y cobro de vacuna para la devolución de la camioneta. Una fuente militar señaló que los pillos habrían exigido a la víctima el pago de 200 mil bolívares para retornar el vehículo.
MIP-TUY Agencia/Jean Carlos Rodríguez
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