Hace más de dos mil años, Hipócrates, el padre de la medicina, descubrió el ingrediente activo de la aspirina, que extrajo de una planta de sauce, y la utilizó para calmar fiebres y dolores de cabeza.
Pero no fue sino hasta 1897 que el alemán Félix Hoffman desarrolló el fármaco como tal. Más de un siglo después, la aspirina, el ácido acetilsalicílico, es uno de los 10 genéricos más vendidos del mundo, con ventas de alrededor de US$1,7 mil millones.
Pero además de ser un analgésico reconocido, la aspirina ha ganado terreno como forma de prevenir ciertas enfermedades. Con frecuencia aparecen estudios que resaltan sus beneficios en la prevención de trastornos cardiovasculares y de varios tipos de cáncer.
Sin embargo, tomar aspirina regularmente también implica riesgos importantes. BBC Mundo habló con varios expertos para analizar cómo y cuándo es recomendable tomar una dosis del medicamento al día.
Beneficios cardiovasculares
Mike Knapton, director médico asociado de la Fundación Británica para el Corazón, dijo que para las personas que han tenido infartos, trastornos de angina, algunos tipos de derrames cerebrales o enfermedades que afectan a las arterias, una dósis baja de aspirina al día puede impedir que ocurran nuevos episodios.
Esta práctica está bien establecida y varias investigaciones han demostrado sus beneficios.
La razón es que la aspirina inhibe la adherencia de las plaquetas en los vasos sanguíneos reduciendo la coagulación de la sangre.
Pero las investigaciones también señalan que el fármaco no necesariamente previene episodios cardiovasculares en personas sanas.
Más bien, «los riesgos de tomar una dosis de aspirina al día superan los beneficios de tomarla en el caso de personas que nunca han tenido este tipo de trastornos», señaló el doctor Mike Knapton.
Reducción de cáncer
De hecho, Peter Elwood, experto británico que participó en el equipo científico que por primera vez mostró los beneficios de este analgésico en problemas cardiovasculares señala que «el futuro de la aspirina está en la reducción de ciertos tipos de cáncer».
Una reciente investigación de la Universidad Queen Mary de Londres sostiene que para personas de entre 50 y 65 años, tomar una dosis de aspirina diaria puede reducir considerablemente el riesgo de desarrollar cáncer de colon, de esófago y de estómago.
«El estudio mostró una reducción de 35% en los casos de cáncer de colon, y de 40% en el número de muertes por esta enfermedad», le dijo a BBC Mundo Julie Sharp, directora del departamento de información sanitaria de la organización británica Cancer Research UK.
«En relación al cáncer de estómago y de esófago, se registró una reducción de 30% en la cantidad de casos y de entre 35% y 50% en las muertes», explicó la experta.
El estudio recomienda que las personas de entre 50 y 65 años tomen una dosis de entre 75 y 100 gramos de aspirina por al menos 5 años y preferiblemente 10 años.
Riesgos importantes
Uno de los efectos secundarios de este medicamento es la posibilidad de una hemorragia interna, incluida una cerebral.
Según explicó Donald Singer, profesor de farmacología clínica del departamento de medicina de la Universidad de Yale en Estados Unidos, «por su efecto descoagulante, la aspirina puede provocar hemorragias por ejemplo en personas que tienen una úlcera estomacal o intestinal, y en ciertos casos también puede producir hemorragia en el cerebro».
La investigación de la Universidad Queen Mary de Londres reconoce estos riesgos y destaca que en el caso de las personas de 60 años de edad que toman una dosis diaria de aspirina por 10 años, los riesgos de sangrado en el aparato digestivo aumentan de 2,2% a 3,6%, y en una proporción pequeña de los casos, 5%, puede llevar a la muerte.
El riesgo aumenta de forma significativa para las personas de más de 70 años.
Pero, ¿hasta qué punto los riesgos superan o sobrepasan los beneficios de la aspirina?
Este es un punto en el que no todos los expertos concuerdan. «No tengo ninguna duda de que el balance está a favor de tomar aspirinas para el caso de las personas de 50 años», le dijo a la BBC el profesor Peter Elwood.
Y resaltó que, aunque el riesgo de hemorragia aumenta, no hay evidencia de que la aspirina esté asociada a sangrados fatales. «La evidencia apunta a que hay hemorragias menores, pero no fatales».
Pero un estudio de la Universidad de Londres publicado en 2012 concluyó que el fármado, tomado diariamente, puede hacer más daño que beneficio a una persona sana.
Julie Sharp señala que precisamente porque no se sabe con certeza quién puede sufrir efectos secundarios «es importante que en cada caso se hagan pruebas para establecer quién puede tomar aspirinas y quién no».
Consulte a su médico
Con tantos estudios que resaltan los beneficios de la aspirina, miles de personas en varios países toman el fármaco para prevenir enfermedades antes de presentar algún síntoma.
Algo que según el profesor Donald Singer, miembro de la Sociedad de Farmacología Británica, puede ser muy peligroso.»Es muy importante que la gente tenga conciencia de los riesgos y consulte a su médico».
Explica que las personas que sufren de cualquier problema de indigestión, o de asma, o las que tienen gota o las que están tomando otros medicamentos que inhiban la coagulación de la sangre, no deben tomar aspirina.
Y eso también se aplica a los menores de 16 años. «Uno podría estar tentado a darle aspirina a un menor, en el caso de familias que tienen un historial de cáncer de colon, por ejemplo, como forma de prevención. Pero esto es muy peligroso porque, en el caso de menores, una dosis diaria puede provocar daños en el hígado».
También es importante no tomar más de la dosis de 75 mgs, o sea un cuarto de una aspirina.
Los beneficios de la aspirina para prevenir enfermedades en casos específicos está bien establecida, pero los expertos insisten en que consultar al médico es esencial para prevenir riesgos.
BBC Mundo