Caracas (Especial/AA).- Este fin de semana, entre la tarde del viernes y la mañana de ayer, habían ingresado a la morgue de Bello Monte 18 cuerpos. Entre esas víctimas estaban, Andrés Ramón Robles, de 23 años de edad y Franklin Guarenas, de 27 años.
Los dos amigos fueron asesinados en las habitaciones de una presión donde vivía en alquiler en el barrio Santa Ana, en Carapita, cuando presuntamente una banda de delincuentes ingreso a robar.
El hecho ocurrió el viernes en la madrugada. Los vecinos contaron que escucharon tiros pero no fue hasta que amaneció que se dieron cuenta del doble asesinato, cuando descubrieron los cuerpos y llamaron a la policía. Presuntamente los sujetos pretendían robar electrodomésticos y objetos de valor. Andrés Robles se ganaba la vida vendiendo bisutería en los alrededores del Metro en Antímano.
En La Dolorita, municipio Sucre, se registró otros doble homicidio. Dos jóvenes fueron ultimados a tiros cuando salieron de una fiesta en una moto.
Los fallecidos, Junior Valera, de 20 años de edad y su amigo de nombre Ender, se marcharon de la reunión a la 1:00 de la mañana porque el primero debía trabajar con su padre temprano en labores de la construcción. El segundo era el que conducía cuando los interceptaron. Fueron ingresados al Hospital Domingo Luciani pero ya habían fallecido.
Yeison González, de 20 años de edad, fue otra víctima de la violencia del fin de semana. Lo mataron en el Tercer Plan de La Silsa, en la parroquia 23 de Enero. Ocurrió la medianoche del viernes, cuando salió de su vivienda a un puesto de comida rápida.
El joven estaba en un sitio de ventas de «perros calientes» cuando azotes de una banda le efectuaron dos disparos en la cabeza. Fue llevado al hospital Miguel Pérez Carreño, donde falleció. Trabajaba como ayudante de camiones distribuidores de prensa.