A consecuencia de un corto circuito en la estación de Petare, conductores de las líneas Turumo, Aragüanei y Miranda tienen que prestar servicio fuera del terminal
El autobús acaba de cargar pasajeros, van hacia Mariche, el fiscal cobra su cuota y el conductor se pone en marcha. Cada quien ocupado en lo suyo, hasta que de pronto el vehiculo se tambalea de una lado y de otro, amenazando por lapsos a que se de la vuelta. El conductor tiene que ir con cuidado, calcular cada uno de sus movimientos para poder salir del cráter en que se ha metido.
Esta es la diaria rutina de los conductores de las distintas cooperativas de transportistas que hacen vida en la Redoma de Petare, municipio Sucre. Problemática que queda aún más evidencia con la proliferación de pozas y lagunas en distintas partes de las calles, a consecuencia de las lluvias de las pasadas horas.
“Cada que tenemos que pasar con extremo cuidado, hemos tenido que hasta retroceder y hacer maniobras para no caer en esos hueco”, dijo Cherlie Contreras, conductor de Línea Miranda, asociación de conductores que opera en la localidad.
Según denuncian las transportistas, el mal estado de las vías han acelerado el deterioro de sus unidades.
Calles y aceras
Al momento de hacer el recorrido, se presentó una situación irregular a la entrada del Terminal a que confluyen las unidades de Metrobus en las proximidades de la Redoma de Petare: una camioneta de la Alcaldía de Sucre se quedó accidentada al caer en un hueco de aproximadamente medio metro de profundidad.
“Esto lleva así más de dos meses, y cada vez se pone peor”, aseguró Manuel Kerales, fiscal de Línea Miranda, quien explicó que el problema con los huecos se originó a causa de la rotura de una tubería de aguas blancas y de las obras para repararla dejo en mal estado la vialidad, la cual solo ha ido empeorando con el paso del tiempo. “Ya no da para más, nos va a tocar rellenar nosotros mismos las calles, no hemos tenido respuesta de ninguna autoridad”.
Esto aunado a la demolición de buena parte de las aceras de la municipalidad, emprendida por la alcaldía a principios de año, que, con la últimas lluvias, las han convertido en barrizales por donde apenas se puede caminar.
“Esto ya es demasiado, ¿si uno de nuestro carros cae en un alguno de los huecos fácilmente se le puede romper la suspensión, y son al menos 5.000 bolívares para reemplazar”, dijo Contreras. “Por aquí pasan diariamente cientos de autobuses, no solo privados, sino también de Metro bus ¿Acaso te parece justo que la gente tenga que andar por un pantanero o tengamos que pasar por un montón de huecos?”,
Razón por la cual le hacen un llamamiento a las autoridades correspondientes para que se aboquen a resolver la problemática que padecen, que atenta contra la calidad de vida tanto de transeúntes como de conductores de transporte público.
Corto circuito
A consecuencia de una corto circuito en uno de los generadores en la Estación del Metro de Petare, fue cerrado el Terminal donde prestaban servicio las líneas Aragüaney, Turumo y Miranda. “Tuvieron que sacarnos, pusieron unos generadores en plena calle y es demasiado peligroso dejar que la gente pase por ahí”, dijo Manuel Perales. Razón por la cual ahora están operando en plena vía publica.
Luís Guillermo Valera
@LuisGValera
Fotógrafo: Jaime Manrique