Escasez de insumos mantiene en situación de alerta a varias panaderías de la capital. Exhortan al gobierno a agilizar aprobación de divisas
Hasta un máximo de cuatro canillas por persona venden las panaderías, debido a que la escasez de harina de trigo y otros ingredientes, como manteca y azúcar, dificultan su elaboración y obliga a los propietarios a racionar la materia prima.
De quince sacos usados diariamente para hornear, ahora gastan dos para ahorrar insumos y garantizar la venta diaria, aunque con restricciones en la cantidad.
“No nos llega harina para hacer la cantidad de panes que se frecuentaba anteriormente, nos toca prestar con otras panaderías. Cuando nos llega tenemos que cancelar 600Bsf cada saco, y no envían el pedido completo tampoco”, dijo Alfonso Alberto Cárdenas, panadero.
Indicó que está situación se debe a la falta de divisas para importar la materia prima, “esto nos está trayendo como consecuencia graves problemas de abastecimiento del pan”.
Varían precios
De la amplia variedad de panes como francés, sobado, acemita y sandwich, sólo elaboran el de canilla, a un costo que oscila entre Bs 8 y Bs 12 la pieza, cuando está regulado en Bs 6,80.
Según Jesús Pineda, encargado de la panadería Tulipán en La Urbina (Caracas), “los panes endulzados no los hacemos por falta de ingredientes, aunque en algunos establecimientos los elaboran con la materia prima sobrante del panetón navideño por la demanda que tiene este pan en los consumidores”.
Manuel Da Sousa, encargado de la panadería Mi Jardín, refirió que los cachitos de jamón quedaron fuera de la carta hasta nuevo aviso.
Explicó que resuelven el desayuno de sus clientes con masas congeladas, como la de hojaldre, con las que elaboran pastelitos.
Trabajan a medio horno
La falta de harina de trigo continúa siendo el principal dolor de cabeza de los panaderos. En conversaciones sostenidas con varios dueños de panaderías, se pudo constatar que algunas han bajado hasta 50% su producción debido a la poca reserva de materia prima que tienen en sus almacenes.
Para el dueño de la panadería Villa Urbina, Ismael Ramos, “no sólo está bajando nuestras producciones sino nuestros pedidos también, nos están llegando 40 sacos de harina de 200 que se piden, y esos hay que estirarlos hasta donde más podamos, por eso es que tenemos que bajar nuestras producciones”.
Retrasos en divisas
Alejandro Da Silva, encargado de la panadería Gran Pan, recalcó que hay muchos retrasos en la aprobación de las divisas, lo que incide en la productividad de las panaderías, “no hay importación, las respuestas que nos dan es que no hay dólares. Se debería traer más harina desde Colombia hasta que se normalice la situación”.
Asimismo, Carlos Enrique Salazar, encargado del panadería Stadium, manifestó que, “con la poca harina que llega hacemos el pan, no hay importaciones ya que la que nos despachan viene de Canadá y se podrán imaginar si no nos despachan más harina”.
Shirley Zambrano