La comunidad de Chuspita continúa en pie de lucha por la liberación de seis jóvenes que fueron detenidos por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) en momentos en que se encontraban buscando trabajo en una obra de asfaltado que se lleva adelante en el sector El Banqueo de la Autopista “Gran Mariscal de Ayacucho”.
De acuerdo a un comunicado enviado a la redacción de La Voz, y que cuenta con el respaldo de la comunidad, los jóvenes Osmar Marrero, Deuli Cruz, José Luis Yánez, José Luis Vera, Eglis Pereira y Enmanuel Aponte fueron aprehendidos por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana a solicitud de la ingeniera encargada de la obra, quien presuntamente se sintió amedrentada por los jóvenes. “Ellos no amedrentaron a nadie; lo que pasa es que estuvieron en desacuerdo con el ofrecimiento de la empresa”, explicó Lenín Navas, residente del sector. “Pero las diferencias en cuanto a la contratación fueron tratadas directamente por parte de los miembros del sindicato, no por ellos; cuando los efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana llamados por la ingeniera se presentaron, se llevaron a todo el que estaba en el lugar”, agregó. “Después de detenidos, los muchachos aparecen en la prensa como extorsionadores de empresarios y supuestamente les incautaron unas garrafas de gasolina, y ellos lo que estaban era buscando trabajo”, aseguró el joven. “Lo peor de todo es que, pese a que fueron declarados inocentes por el juez Jorge Novoa, el fiscal apeló la sentencia y llevó el caso a una instancia superior”, se quejó.
El procedimiento fue realizado por funcionarios del Comando Zonal 442 e Inteligencia de la Zona de Defensa Integral (Zodi) del estado Miranda.
Aseguraron los denunciantes que los jóvenes detenidos cuentan con el total aprecio de la comunidad y que además no tienen antecedentes penales, por lo cual no entienden la actitud del fiscal, quien pese a que los muchachos han sido declarados inocentes en forma reiterada, sigue apelando a todas las instancias que le permite la ley.
“La verdad no puede ser posible que estos muchachos que estaban buscando trabajo para llevar comida a su casa, ahora se encuentran presos y acusados por delitos que no cometieron”, concluyó Navas.
El fiscal 6º de Miranda, Wilmer Cabello, fue el primero en ser informado del procedimiento militar.
Edward Sarmiento
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