Habitantes piden presencia de las autoridades para lograr el acondicionamiento total de las calles, las cuales se encuentran afectadas en un 95%, y además esperan lograr la atención en la distintas problemáticas que presenta la comunidad
Vecinos del caserío Maturín ubicado en el municipio Brión del estado Miranda se sienten cansados por el paupérrimo estado de las vía de acceso a la zona, lo cual ha convertido en los últimos años en un «karma» el poder accesar el transporte público, esto como principal problemática, acompañada de las fallas en el aseo urbano, la energía eléctrica y el gas.
Calle El Manantial
Tres años específicamente llevan en condiciones precarias los habitantes de la calle El Manantial, cuya vialidad es la más afectada de todas, lo cual ha traído como consecuencia la interrupción prolongada del transporte público, el cual desde el tiempo mencionado presta un servicio por cierta zona y por otra no. Habitantes dicen aceptar que los carros no pasen, porque las condiciones realmente no están dadas, debido a las troneras que tienen a lo ancho y largo la principal avenida.
En contacto directo con miembros del consejo comunal Manantial parte baja, se conoció de proyectos para mejorar la vialidad de manera mancomunada con el Consejo Federal de Gobierno, sin embargo, aparentemente es insuficiente y sólo se logró una mínima parte.
“Recibimos para la implementación de 90 metros cúbicos de concreto, y esperamos rendir cuentas para recibir otro aporte, pero sigue siendo insuficiente”, acotó Yaquelin Panza, vocera de la Unidad Administrativa del Consejo Comunal.
Asimismo, se conoció que años atrás se inició una obra bajo una asociación que existía, que estimaba cubrir la calle principal que comunica a toda la comunidad, pero sólo se logró una parte y el resto quedó igual por falta de presupuesto.
“La obra que allí se inició quedó a medias, y hoy día más de 150 familias sufrimos la consecuencias”, refirió Yaquelin Panza.
De igual manera, la vocera del comité de Agua del Concejo Comunal Maturín Circuito 1,habló de la deficiencia de la vialidad, donde hay troneras que tienen más de 6 años. “Acá los mismos vecinos tapan los huecos con piedras, pero llueve y vuelve a quedar igual, se necesita una atención adecuada”, acotó Yesenia Yánez. Además la misma aplaudió la gestión del consejo comunal, quienes actualmente realizan trabajos para beneficio de familias sin vivienda.
El aseo es «otro calamar»
Vecinos manifestaron su pesar por las fallas en el servicio del aseo urbano. Contaron que se han visto en la obligación de quemar la basura o llevarla por su propia cuenta fuera de la localidad, porque los mismos no aparecen. “Hasta tres meses debemos esperar por el aseo, hay veces que debemos quemar la basura o llevarla a otro sitio por nuestros propios medios. Hace días llegaron y me extrañe, porque a ellos no se les ve por esta vía”, señaló Yoleidi Bolívar, vocera de la Unidad Administrativa del consejo comunal.
La electricidad es otro asunto
La luz últimamente ha presentado fallas, y en busca de soluciones miembros del consejo comunal realizan reuniones, puesto que actualmente hay lugares que duran hasta 2 días sin electricidad, sin embargo, la apatía se ha adueñado de los lugareños y no asisten a las convocatorias. “Necesitamos que los vecinos asistan, las reuniones que se realizan nos incluye a todos; y es necesario que formen parte de los beneficios que queremos brindarle al sector”, enfatizó Adda Marrero, integrante del comité de energía del consejo comunal,
Carlos G. Marrero
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