Occidente y, particularmente, Estados Unidos han venido estableciendo estrategias energéticas globales para no exportar petróleo de Medio Oriente. Así lo explicó el profesor universitario Elie Habalian.
El profesor aseguró que el año 2015 no será positivo para los precios del petróleo, habrá un mercado petrolero deprimido causado por iniciativas contra Rusia y contra Irán, pero no serán demasiado bajos para no beneficiar a China ni para que los ingresos de Arabia Saudita entren en rojo.
Acotó que Arabia Saudita planea aumentar su producción de petróleo a 19 millones de barriles diarios. “Dios nos agarre confesados porque no sé qué haremos los venezolanos con 2 millones 300 mil barriles al día”, destacó.
Estados Unidos como exportador
Los precios del petróleo están bajando y Estados Unidos está poniendo en práctica políticas que lo están convirtiendo en el exportador neto de gas, tienen un proyecto en el Congreso que les permitirá exportar energía y se convertiría en un competidor en los precios de petróleo, pero ya no como consumidor.
“En el programa de gobierno de Obama, en su primer mandato, él recomendaba que no se importara ni un barril del Medio Oriente ni un barril de Venezuela (…) A nivel global Estados Unidos tiene varios adversarios: un adversario económico que es China y el otro adversario internacional muy importante, nuclear y agresivo es la Rusia Federativa de Putin”, detalló Habalian.
Destacó que con los problemas en Medio Oriente el único país que puede mover las piezas a nivel global es Estados Unidos, mientras que los demás tienen que hacer alianzas. “Esas alianzas no son tan efectivas porque no salen las decisiones de una sola capital”, agregó.
Estados Unidos y Arabia Saudita (mayor exportador de petróleo del mundo) parecen tener coincidencias en aumentar la oferta de petróleo al mercado para contribuir aún más a bajar los precios; así consiguen presionar a Irán y a Rusia, porque por cada 12 dólares que baja el petróleo, Rusia deja de percibir 40 mil millones de dólares, ya que sus únicas divisas vienen del petróleo, del gas y de los metales.
“Ese es el talón de Aquiles de Putin y por ahí lo van a parar”, aseguró el profesor Habalian.
Con información de Globovisión