El presidente de Burkina Faso, Blaise Compaoré, anunció hoy que abandona el poder del país para permitir la organización de elecciones en el plazo de 90 días, según una declaración leída en la televisión burkinesa.
«Yo declaro que el poder queda vacante para permitir la organización de elecciones justas y democráticas en 90 días», afirmó Compaoré en un comunicado firmado por él mismo, tras las masivas protestas ciudadanas y de la oposición que exigieron hoy su marcha.
Compaoré justificó su decisión en «la degradada situación sociopolítica y la amenaza de división dentro de nuestro Ejército».
«Por lo que a mí respecta, creo que he cumplido con mi deber», añadió.
Las protestas contra Compaoré, que lleva en el poder desde 1987 tras protagonizar un golpe de Estado en el que murió su antecesor, Thomas Sankara, arrancaron hace dos días, cuando miles de personas se manifestaron en la capital al grito de «Veintisiete años es suficiente», en alusión al tiempo que lleva Compaoré en el poder.
Ayer, las protestas se extendieron e intensificaron en todo el país, especialmente en Uagadugú, donde se desató el caos cuando centenares de manifestantes asaltaron e incendiaron el Parlamento de en protesta por la votación de la enmienda constitucional.
Desde su independencia en 1960 hasta la llegada de Campaoré a la presidencia en 1987, la historia de Burkina Faso, antes conocido como Alto Volta, se ha caracterizado por una sucesión de golpes de estado.EFE