Durante unas seis horas, los accesos hacia el Este de Caracas permanecieron bloqueados tras la manifestación realizada por cinco líneas de taxis así como de transporte público que unidos a vecinos, deploraron la inseguridad que azota al municipio metropolitano
El asesinato de un socio de la línea de taxis La Lagunita-El Hatillo, detonó en una enorme tranca de seis horas que compañeros de cinco líneas de transporte pusieron en marcha en el municipio El Hatillo, en demanda de seguridad y para denunciar que las autoridades municipales no ha cumplido con las funciones de brindarles protección. Al finalizas la reunión con las autoridades, se acordó entre otras medidas, la intervención de la Policía del Hatillo.
El Viceministro del Sistema Integrado de Policía (Visipol), Edgar Barrientos, anunció tras la reunión en que participaron distintos entes policiales y la alcaldesa Miriam Do Nascimentos, se acordó la intervención de Polihatillo en primer grado y primer ecalón para darle asistencia técnica para que se adecue al nuevo sistema de policía, la designación de un coronel de la GN para que coordine los procedimientos policiales en El Hatillo, reuniones periódicas con para avaluar el desarrollo de la gestión y patrullaje coordinado por parte de la Policía Nacional Bolivariana.
La protesta en demanda de seguridad se produjo tras la muerte del taxista Carlos Tarazona, de 50 años de edad, socio número 60 de la línea La Lagunita-El Hatillo.
A las 5:00 de la mañana de ayer los taxistas de las líneas Lagunita-El Hatillo, Santa Rosalía, Sol Mediterráneo, Cooperativa Bella Vista y la Unión Conductores El Calvario-Plaza Las Americas, decidieron cerrar en una protesta contra la inseguridad, todos las vías de accesos al municipio, quedando únicamente disponible la vía de La Unión que comunica con la Universidad Simón Bolívar.