El primer ministro británico, David Cameron, informó este miércoles de la suspensión de un programa de formación a soldados libios tras conocerse varios casos de agresiones sexuales ocurridos durante su estancia en Inglaterra.
El anuncio llegaba después de que el martes el Ministerio de Defensa indicara que pondría fin antes de tiempo al entrenamiento en el que participan los primeros 300 militares libios llegados a Inglaterra en julio, en el marco de un programa destinado a formar unos 2.000 hombres.
Durante la sesión de control al ejecutivo británico en la Cámara de los Comunes, Cameron calificó de “totalmente inaceptables” los hechos de los que se acusa a cinco de los soldados libios estacionados en la base de Bassingbourn, en el sudeste de Inglaterra.
Dos oficiales de 20 y 27 años se declararon culpables de un delito de agresión sexual ante un tribunal de Cambridge, un tercero comparecerá próximamente por el mismo asunto y dos militares más, de 22 y 33 años, fueron imputados por violación.
El Ministerio de Defensa británico ha puesto en marcha una investigación para decidir el futuro de este programa de formación castrense, anunciado en 2013 en el marco del G8 para contribuir al restablecimiento de la seguridad en Libia tras la caída del régimen de Gadafi en 2011.
Durante su comparecencia, Cameron también descartó conceder el asilo político a los 5 militares libios que lo habían solicitado a su llegada a territorio británico, según informó la BBC. Un portavoz precisó, no obstante, que el gobierno británico continuaría apoyando a Libia, eso sí, reconsiderando la mejor manera de entrenar a sus fuerzas de seguridad.
AFP