Desde la Vicepresidencia de la República les prometieron reubicarlas en un refugio para luego gestionarles viviendas dignas, pero todo quedó en promesas y mientras tanto viven hacinadas en un galpón en Madosa
Treinta familias que desde hace 8 años viven hacinadas en un galpón que han denominado “11 de Marzo” en la comunidad de Madosa, detrás de Súper Líder en Charallave, tomaron en la mañana de ayer la sede de Protección Civil en demanda de una solución habitacional.
“Hace 6 meses nos prometieron reubicarnos en unas casas dignas y aún estamos esperando. Actualmente pasamos muchas necesidades y no queremos seguir viviendo en estas condiciones infrahumanas”, dijo Keila Rondón, una de las afectadas.
Rondón recordó que el área donde actualmente habitan está sobre unos tanques subterráneos que eran utilizados por la empresa que allí funcionaba. La misma trabajaba con productos químicos, de allí que los vecinos consideran que se trata de una bomba de tiempo. “Cada vez que llueve estos tanques se llenan de agua y se rebosan, inundando nuestros espacios. Además muchas veces erupcionan, poniendo en peligro nuestras vidas.
La declarante informó que representantes de la Vicepresidencia los visitaron y les ofrecieron ser llevados a un refugio en la estación Charallave Norte, mientras se les gestionaba una vivienda, sin embargo todo quedó en promesas.
“Hace tres días nosotros entregamos un comunicado en la Dirección de Protección Civil del municipio Cristóbal Rojas, y nos prometieron enviar el respectivo informe sobre nuestro caso a la Vicepresidencia para darnos una respuesta en horas de la tarde, pero tampoco cumplieron”, indicó Rondón, quien negó una información oficial enviada por la alcaldía de Charallave a los medios donde el gobierno local asegura que estas 30 familias habían sido llevadas a un refugio.
Vale destacar que en la mañana de ayer ninguna autoridad atendió a estas personas en la sede de Protección Civil. “Nos dijeron que viniéramos a las 5 de la tarde que es cuando está el director”, señaló Rondón.
El piso como cama…
Una promesa hecha por un general adjunto a la Vicepresidencia de la República hizo que los vecinos del galpón de Madosa entregaran sus enseres a sus familiares. “El general Elemileni Colin nos dijo que cuando nos trasladaran al refugio no podíamos llevar este tipo de pertenencias, ahora resulta que seguimos aquí pero sin nada”, dijo Rondón, quien acotó que por tal motivo están durmiendo en el piso. “Es que hasta las camas las regalamos”, acotó.
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