La precipitación de la candidata de VP en anunciar su triunfo prematuramente y la posterior comprobación de que el bachiller Jorge Eliezer Arellano fue el ganador, generaron hechos que deben ser condenados por quienes trabajamos en favor de la democracia y de la civilidad, sucedan en el escenario que sucedan
Si algo mantiene repotenciada la esperanza de los venezolanos en el futuro, es la participación activa de la actual generación de jóvenes en la política. Las universidades autónomas continúan siendo un hervidero de las más variadas tendencias políticas, y son también lugares de debate y de fogueo para los futuros liderazgos que tomarán posiciones de responsabilidad más pronto que tarde.
Sin embargo, parte de la enseñanza tiene que ver con el juego limpio, con la ética, con pensar con la cabeza fría y sobretodo, con saber perder.
Y estos comentarios los hacemos a propósito de las recientes elecciones de la Federación de centros Universitarios de la Universidad de Los Andes, en las cuales, acciones erradas condujeron a situaciones deplorables.
Desde esta tribuna nos hemos declarado como incondicionales defensores de la Unidad como alternativa de poder para llevar a Venezuela por otro rumbo de manera democrática. Por ello, desde siempre deploramos el hecho de que la candidata de Voluntad Popular, decidiera postular su candidatura por fuera de la coalición unitaria.
Quienes trabajamos por materializar una opción de gobierno diferente a la que hoy está al frente de Venezuela, debemos ir con pie de plomo. “Paso corto y vista larga”, decía nuestros abuelos.
Lamentablemente, no nos equivocamos. Y no hay satisfacción alguna en decir que tuvimos razón. La precipitación de la candidata de VP en anunciar su triunfo prematuramente y la posterior comprobación de que el bachiller Jorge Eliezer Arellano fue el ganador, generaron hechos que deben ser condenados por quienes trabajamos en favor de la democracia y de la civilidad, sucedan en el escenario que sucedan.
La violencia por parte de individuos no identificados, el secuestro y destrucción de material electoral y la agresión a estudiantes, nos regresan a los peores usos de la política, a acciones que debemos desterrar con nuestra más enérgica condena.
Cuando las aguas volvieron a su cauce, se pudo confirmar finalmente al ganador de la contienda y apostar por el pase de página tan necesario cuando ocurren situaciones de tal naturaleza.
Pero ello no debe significar el olvido de las vergonzosas situaciones de violencia, como tampoco la necesaria reflexión ante los errores cometidos, que no deben repetirse por el bien de todos los involucrados y más allá, por el del país.
En política es muy cierto aquel dicho que reza” quien cede el paso, se ensancha el camino”. El aprender a esperar es una de las más valiosas lecciones sobre este complicado oficio, del cual se han escrito tantos libros, pero que al final del día no se aprende sino con el ejercicio, con la constancia a través de los años, y sobretodo, con los golpes que dan los reveses, más que con el triunfalismo peligroso que inyectan los éxitos.
Apostamos al presente y al futuro de todos esos apasionados dirigentes estudiantiles, por los ganadores y por los perdedores; y también por quienes hoy han cometido desaciertos. Quizá en el fondo de los mismos esté la raíz de éxitos por venir. Los necesitamos a todos, reiterando una vez más el llamado a la Unidad, en la cual creemos tercamente.
El nuevo escenario de Obama
El hecho de que el Partido Republicano haya ganado las elecciones parlamentarias de Estados Unidos en la mitad del segundo período del demócrata Barack Obama, nos hará presenciar sin duda una lección de convivencia de poderes en la nación del norte.
Estas elecciones de “mid-term”, es decir, que ocurren a la mitad del período presidencial, suelen señalar el giro futuro del electorado estadounidense. Se trasluce un desencanto hacia el otrora ungido Obama y sin duda, el inquilino de la Casa Blanca debe tomar nota, así como toda la clase política estadounidense, ya que parece irreversible el giro hacia el republicanismo. Sin embargo, el entendimiento, la negociación y el contrapeso de poderes, seguramente actuarán como equilibradores del sistema, una situación digna de elogio.
Santos y los secuestrados
En un giro que para muchos fue sorprendente, el presidente de Colombia Juan Manuel Santos, suspendió las conversaciones con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, mientras se mantengan cautivos los sec
uestrados por esta organización guerrillera.
«A las FARC les exijo, y no solo yo, se lo exigen nuestra nación y toda la comunidad internacional, que demuestren su voluntad de paz con acciones y no solo con palabras», subrayó el jefe de Estado. Muchos han acusado a Santos de falta de firmeza con este grupo, mientras otros apuestan a su gestión por la paz, lo cual se ha erigido en la característica más polémica de su mandato. Este giro inesperado sin duda llama nueva mente la atención de la opinión pública mundial.
20 mil millones
La compañía española Telefónica calcula que para el año 2023 habrá 20 mil millones de dispositivos interconectados en el mundo, por lo cual la carrera es para dar servicio a tan asombrosa cifra de usuarios, y abaratar los costos de acceso.
No solo el abaratamiento es importante, sino también la practicidad y sencillez del uso, para permitir estar a los usuarios permanentemente conectados y desde diversas clases de dispositivos. Este cálculo también lanza interrogantes sobre la privacidad, la cual debe ser protegida, y es responsabilidad tanto de los usuarios como del proveedor del servicio.
Cambio climático
China y Estados Unidos anunciaron un acuerdo para luchar contra el cambio climático, el cual incluirá recortes en sus emisiones de gases invernadero. La iniciativa, acordada por los presidentes de China, Xi Jinping, y Estados Unidos, Barack Obama, constituye el primer anuncio de recorte de emisiones contaminantes por parte de China y uno nuevo de parte de Estados Unidos.
Xi y Obama hicieron el anuncio durante una comparecencia ante la prensa tras dos días de reuniones en Pekín, en la que han repasado todos los niveles de su relación, con el acuerdo sobre cambio climático como principal resultado tangible. El mandatario estadounidense calificó la propuesta como “ambiciosa pero alcanzable”, mientras ambas potencias dan un ejemplo de cómo entenderse sobre asuntos claves para la humanidad.
David Uzcátegui