El británico Lewis Hamilton (Mercedes), que este domingo se proclamó campeón mundial de Fórmula 1 por segunda vez en su carrera tras ganar el Gran Premio de Abu Dabi, insistió tras su éxito en calificar de «increíble» su año y todo lo que estaba viviendo en esta despedida del curso.
«Ha sido un año increíble. No me lo creo todavía. Llegué a este equipo el pasado año y mucha gente decía que había tomado una mala decisión, pero hicimos muchos progresos y más esta temporada, apoyados por el apoyo de los aficionados, que ha sido fenomenal», declaró Hamilton en su conferencia de prensa en la capital emiratí.
«Nunca podría haber imaginado tanto apoyo. Como ya dije en el podio, es el mejor momento de mi vida. Es casi surrealista, un poco como si me saliera de mi propio cuerpo, como si viera todo esto llegar, pero sin que llegara realmente. Voy a hacer todo lo posible para no olvidarme de nadie en los agradecimientos. También le doy las gracias a Dios», añadió.
Hamilton fue preguntado por cómo vive este nuevo título en la Fórmula 1, seis años después del primero, conquistado en 2008 cuando corría para McLaren.
«En 2008 era especial, pero ahora es todavía mejor. Cuando llegué aquí tenía mucha presión y yo trataba de no hacer caso, de mantener la concentración», explicó.
«No he dormido mucho esta noche. Me acosté a la una y me desperté a las cinco. Me fui a correr, a que me dieran un masaje y entonces me dije que iba a estar cansado. Luego llegó mi familia y me dieron la sorpresa en el desayuno. Fue genial. Yo quería que vinieran, pero sabía que el fin de semana iba a ser intenso y no sabía si podía pasar tiempo con ellos», apuntó sobre cómo ha vivido las horas previas a la carrera.
Hamilton llegaba como líder a esta última carrera y como favorito en el pulso con su compañero de Mercedes, el alemán Nico Rosberg, que tuvo un problema de pérdida de potencia en la última carrera del año, que le hizo quedar decimocuarto.
«Con Nico, la pelea ha sido increíble durante todo el año. Ha sido un rival fenomenal. Nos conocimos en 1997 y siempre nos dijimos que sería increíble correr algún día en la misma escudería», subrayó sobre su relación con el ahora subcampeón mundial.
«Hoy hizo un buen trabajo. Es una pena que su coche no fuera lo suficientemente rápido y que no pudiera luchar al máximo», indicó.
Rosberg, en un gesto de deportividad, fue a la sala de espera del podio para abrazar y felicitar a Hamilton, para poner el sello final a la rivalidad entre ambos este año, que por momentos adquirió cierta tensión.
«Llegó como un profesional y me dijo que había pilotado realmente bien. Puedo hacerle el mismo halago, ya que durante todo el año ha pilotado increíblemente, sobre todo en las clasificaciones. Bravo», sentenció sobre su compañero de Mercedes.
AFP