Lewis Eduardo Dugarte Méndez (22), estudiante del primer semestre de Seguridad Industrial en el Instituto Universitario Antonio José de Sucre, fue asesinado cuando intentaron asaltarlo en La Urbina y corrió para escapar de los delincuentes.
Lo sorprendieron en la parada del Metrobús que se encuentra en la avenida principal. Acababa de salir de clases con varios compañeros de quienes se separó porque tomaban rutas distintas y el cruzó hacia Farmatodo. Eran las 8:30 de la noche.
Una pareja de motorizados se le acercó. Querían robarle una cadena de oro y unos anillos del mismo material que llevaba puestos, pero el muchacho despavorido corrió y le dispararon por la espalda.
Los antisociales huyeron dejando a su víctima en el pavimento. Los amigos del joven que estaban cerca lo auxiliaron y lo subieron a una moto que pasaba por la zona para llevarlo a la clínica de La Urbina, donde murió la madrugada del martes.
Algunos familiares que esperaban ayer en la morgue de Bello Monte para retirar el cuerpo, contaron que los ladrones le efectuaron 4 tiros, pero tres pegaron a su morral, mientras que uno lo hirió en la región lumbar derecha. Cuando lo ingresaron a la clínica aún tenía signos vitales pero respiraba por sus propios medios.
El muchacho estudiaba de 5:30 de la tarde hasta las 9:30 p.m, pero algunas veces salían antes. En el día cuidaba a su hermano de 9 años en su vivienda ubicada en Catia. Eran 4 hermanos, dos hembras y dos varones.
Una pariente culpó de este y otro crímenes que ocurren en el país al gobierno nacional. “Gracias a las maravillas del presidente hay problemas de inseguridad. Es una situación que deja mucho que desear”, comentó.
AA