EEUU defendió este lunes la actuación de su embajada en Caracas y aseguró que seguirá expresando su opinión “sobre la falta de respeto a los derechos humanos y la democracia en Venezuela”, después de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, acusara a la legación de actuar de forma “peligrosa”. reseñó la agencia EFE.
La portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, respondió durante su conferencia de prensa diaria a las acusaciones que Maduro dirigió contra la misión estadounidense en Venezuela y el presidente estadounidense, Barack Obama, durante una entrevista televisiva el sábado.
“Nuestra embajada opera de acuerdo con los requisitos de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas”, sostuvo Psaki.
La legación “sigue operando como lo ha hecho durante mucho tiempo en el país, de acuerdo con todas las obligaciones legales y todas las obligaciones aceptadas internacionalmente”, garantizó.
“Seguiremos expresando nuestras preocupaciones por la falta de respeto a los derechos humanos y la democracia en Venezuela, recientemente evidenciadas por la decisión venezolana de imputar a la líder de oposición y exdiputada de la Asamblea Nacional María Corina Machado, por supuestamente conspirar en un plan para asesinar al presidente Maduro”, añadió la portavoz.
EE.UU. “sigue pidiendo al Gobierno venezolano que respete los derechos a la libertad de asamblea pacífica y asociación, que libere a los prisioneros políticos y que actúe en concordancia con los principios establecidos en la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre y la Carta Democrática Interamericana”, indicó.
En su entrevista del sábado con la cadena de televisión Telesur, Maduro dijo que la legación diplomática estadounidense está “actuando de manera peligrosa”, por lo que su Gobierno está “evaluando la situación”.
“Tengo mucha información del intervencionismo” de la embajada estadounidense al punto de que “comienza a ser intolerable”, repitió sin ofrecer más detalles, aunque sugirió que su acusación apunta a supuestas financiaciones a actividades de sus opositores.
En su entrevista, Maduro también opinó que Obama “está esposado” y “es un rehén de los poderes reales de Estados Unidos”, y “ha decidido sumarse a las peores causas, en el mundo y en Estados Unidos”, además de no hacer los esfuerzos suficientes por recomponer la relación entre Estados Unidos y Venezuela.
Psaki rehusó hoy hacer comentarios sobre esas declaraciones de Maduro.
EE.UU. y Venezuela, que mantienen tensas relaciones desde que en 1999 asumió el antecesor y mentor de Maduro, Hugo Chávez, fallecido hace casi dos años, mantienen sus legaciones diplomáticas a nivel de agregados comerciales tras las expulsiones mutuas de sus embajadores hace cuatro años.