Ante la contundencia del acervo probatorio del Ministerio Público, fue condenado a 17 años y tres meses de prisión, José Antonio Guillén Gutiérrez (61) y a cinco años de prisión su hijo, Argenis Guillén Rivas (29), tras admitir su responsabilidad en la muerte de un adolescente (12), ocurrida el 9 de junio de 2007 en la aldea El Orcas, municipio Sucre del estado Mérida.
En el inicio del juicio oral y público, la fiscal 10ª de Mérida, Doris Rojas, ratificó la acusación contra el padre por los delitos de homicidio intencional simple, abuso sexual a adolescente y suministro de sustancias nocivas; mientras que a su vástago se le confirmó la acusación por homicidio intencional simple en grado de complicidad no necesaria.
Tales delitos están previstos en el Código Penal y la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes.
Frente a la admisión de los hechos, el Tribunal 2º de Juicio de Mérida dictó las condenas para Guillén Gutiérrez y su hijo Guillén Rivas. Ambos serán recluidos en el Centro Penitenciario Región Andina, ubicado en San Juan de Lagunillas, municipio Sucre de la referida jurisdicción.
El citado día de junio de 2007, el sexagenario invitó a un adolescente de 12 años a su vivienda, ubicada en la aldea El Orcas, municipio Sucre del estado Mérida, donde le dio licor, además de abusarlo sexualmente.
El hombre, bajo los efectos de bebidas alcohólicas, se quedó dormido sobre la víctima, que murió asfixiada. En horas de la noche, llegó a la residencia su hijo, Argenis Guillén Rivas, quien no denunció el suceso.
Al día siguiente, el victimario informó la muerte del adolescente ante una delegación local de la Policía de Mérida, por lo que se inició una investigación.
En septiembre de este año, la Fiscalía 10ª de la referida jurisdicción asumió este caso y solicitó la privación de libertad de Guillén Gutiérrez y Guillén Rivas.