El pilluelo fue identificado por la policía como Robert José Pérez Martínez, de 29 años de edad, quien tenía en su poder una pistola marca Px4, modelo 22, calibre 9 milímetros
Las pretensiones delictivas de un antisocial llegaron a su fin, luego que una de sus víctimas lo diera de baja, al propinarle un certero balazo, cuando intentaba cometer un robo en el interior de un apartamento del conjunto residencial “Esimar”, ubicado en las adyacencias del banco Banesco de Charallave.
La información recabada en predios policiales revela que el ahora occiso fue identificado como Robert José Pérez Martínez, de 29 años de edad, quien es señalado de haber ingresado, junto a otro compinche, a la fuerza a uno de los inmuebles del referido edificio donde intentaron cometer un robo.
Al parecer Pérez Martínez, por razones desconocidas, tenía en su poder una llave de la puerta principal de la torre a la cual ingresó y se dirigió a uno de los apartamentos donde tocó el timbre; una vez que el propietario abrió la puerta para saber quién llamaba fue sorprendido por el cañón de la pistola que empuñaba uno de los extraños, quienes lo obligaron a abrir la reja.
Se supo que cuando Pérez Martínez estaba adentro de la residencia tomó como rehén al padre de familia para obligar al resto de las personas a que entregaran a su compinche dinero, joyas y otros objetos de valor. En medio de la tensión uno de los habitantes del inmueble, de quien omitimos su identidad por razones de seguridad, hábilmente desenfundó una pistola y le asestó un certero balazo en la región maxilar derecha a Pérez Martínez muriendo éste de manera inmediata, mientras que su cómplice logró escapar.
Al lugar del suceso se presentaron comisiones del Eje contra Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de los Valles del Tuy al mando del comisario William Fernández, que procedieron a levantar el cadáver.
En la escena del suceso los detectives del buró judicial colectaron una pistola marca Px4, modelo 22, calibre 9 milímetros que al parecer había utilizado el ahora occiso para amedrentar a sus víctimas. También se incautó el arma manipulada en defensa propia por uno de los agraviados.
Es importante destacar que una fuente ligada a las pesquisas señaló que este modus operandi era el que utilizaba este dúo de delincuentes para cometer robos en estas residencias.
Los funcionarios tratan de identificar al antisocial que se dio a la fuga.
MIP-TUY Agencia/Jean Carlos Rodríguez
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