Las principales organizaciones musulmanas en Francia pidieron el martes a su comunidad «calma» y «evitar las reacciones emocionales», ante la salida el miércoles del primer número de Charlie Hebdo desde el atentado contra el semanario satírico, que lleva a Mahoma en la portada.
El Consejo Francés del Culto Musulmán (CFMC), así como el UOIF, cercano a los Hermanos musulmanes, «llamaron a la comunidad musulmana de Francia a guardar la calma y a evitar las reacciones emotivas» y señalaron además que respetan la libertad de expresión.
Se estima que Francia tiene entre 3,5 y 5 millones de musulmanes.
Este número representa en primera plana a Mahoma, con una lágrima, portando un cartel «Je suis Charlie», tal como hicieron los millones de personas que se manifestaron el domingo en Francia y en numerosas ciudades del mundo. El dibujo está bajo el titular «Todo queda perdonado», una fórmula de apaciguamiento que contrasta con la habitual feroz ironía de la revista.