El defensor del pueblo, Tareck William Saab, dijo hoy que aún se encuentran detenidas 51 personas por las protestas antigubernamentales del año pasado y señaló que ningún dirigente político tiene derecho a reeditar estos hechos, llamar a la violencia o «provocar disturbios».
«De 51 detenidos se están revisando diez casos que están en proceso judicial», dijo en una rueda de prensa el nuevo defensor, designado por la mayoría oficialista del Parlamento en diciembre pasado.
Saab aclaró que no podía revelar las identidades de esos detenidos porque «es parte de la reserva legal», pero indicó que 14 de ellos son funcionarios policiales.
«No debe ocurrir jamás que ningún funcionario policial o militar en el uso indebido de su arma, llámese perdigones o cualquier otro tipo de instrumento, dispare y asesine a personas que pueden estar en ese momento inermes», señaló.
Pidió que la confrontación política se mantenga en el escenario del debate «a través de la vía constitucional, a través del diálogo y a través del voto» y jamás reeditar «circunstancias dramáticas y difíciles» como las que causaron la muerte de 43 personas y 800 heridos en hechos derivados de las protestas que se registraron entre febrero y abril del año pasado.
«Ninguna autoridad política o jefe de un partido está en el derecho, en vista de una circunstancia, una coyuntura de carácter político, llamar a la violencia, romper el hilo constitucional, provocar disturbios, motines y que finalmente tengamos la tragedia que hemos visto», reiteró.
Dijo, además, que «la fecha detonante» de estos acontecimientos fue el 12 de febrero pasado, cuando se desarrolló una marcha convocada por un sector estudiantil y por el dirigente Leopoldo López, preso desde entonces. EFE