“Ya estoy cansado de hacer maldades y de huir, soy chango, quiero cambiar. Dos años huí por matar a dos mujeres en Sucre, por esa causa he perdido a mi familia, incluso mataron a mi hijo”, confesó en una entrevista Jaime Cárdenas
Con apenas 23 años de edad, Jaime Benjamín Cárdenas Pardo, alías “El Jimmy”, confesó que había asesinado a más de 30 personas en varias provincias de Bolivia. Había sido detenido el jueves 17 de febrero de 2011 por la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de La Paz por atacar con un cuchillo a un ciudadano peruano.
En el interrogatorio “El Jimmy” confesó que días antes asesinó a un hombre para robarle una laptop y que violó y mató a dos mujeres universitarias en la población de Sucre. Después de un examen psicológico, los investigadores policiales lo calificaron como “asesino psicópata serial confeso”.
Las averiguaciones de las muertes de las universitarias Nairobi Alexis Muñoz de 21 años y Marfa Delgado Roso de 20 años, cuyos cadáveres fueron hallados el 11 de octubre del 2009 en la población de Sucre, desnudaron otros hechos delictivos donde estarían involucrados Ever Albis Vera (funcionario policial) y Jaime Cárdenas Pardo.
De las drogas a la violencia
Según sus propias palabras, la niñez de Jaime Cárdenas fue tranquila, nunca vivió en medio de la violencia, a pesar de que sus padres eran divorciados. Nació en abril de 1987, tiene nueve hermanos y empezó a delinquir para llamar la atención de su familia y para hacerse “popular”, pues estudió en un colegio nocturno, donde la mayoría de los muchachos eran pandilleros y les gustaba beber.
A los 14 años de edad cometió su primer atraco, a un borracho de la calle al que le robó su celular porque necesitaba dinero para comprar licor. Después robaba autos o motos, con lo que ganaba entre 100 y mil 200 dólares. Ya a esta corta edad consumía cocaína y otros narcóticos y desde los 11 años había empezado a ingerir bebidas alcohólicas, por lo que pronto se convirtió en un joven sumamente violento, al actuar bajo los efectos de estas sustancias.
Por el asesinato de las universitarias, Jaime Cárdenas había sido sentenciado a 30 años prisión. En la audiencia donde fue condenado, Cárdenas lanzó una botella de plástico a la fiscal asignada al caso y la amenazó con vengarse si es que lograba salir de la cárcel.
“El Jimmy” confesó que robando a la gente había matado como a 15 personas y que cuando tenía 17 años fue arrestado por homicidio por la Policía de Cochabamba, pero quedó en libertad porque mintió sobre su edad. Reconoció también que en la población de Santa Cruz apuñaleó a otras personas en peleas.
Uno de los relatos más escalofriantes de Jaime Cárdenas se refiere cuando le mataron a su hijo: “El novio de la muchacha que asesiné, en venganza, mandó a matarme. Los que contrató eran de más sangre fría que yo, apuñalaron a mi hijito en el pecho. Digo ¿qué corazón pueden tener para matar a un niño? Por esa causa asesiné a 15 más, diez cruceños, dos cochalas y tres de Sucre”.
Fuga y recaptura
Mientras cumplía su condena, el viernes 30 de marzo de 2012, se fugó del penal de San Roque (Sucre), donde cumplía sus años de prisión. A pesar de que se activó de inmediato el sistema de seguridad del recinto penitenciario, no se pudo recapturar al prófugo.
La fuga de este recluso causó gran conmoción entre la población del lugar y los medios de comunicación locales difundieron su fotografía y su perfil psicológico. “Él tenía una hora de salida para hacer sus necesidades biológicas, es así que aprovechó ese tiempo para distraer a su custodio y trepar la verja saltando a la calle Serrano. Escapó en una vagoneta de color plomo”, informó Roberto Ledesma, subcomandante de la Policía en Sucre.
Las unidades de inteligencia de la policía realizaron operativos de rastrillaje en procura de lograr su recaptura, sin embargo, no se descartaba que hubiese escapado al interior del país, por lo que se coordinaron las acciones con el Comando General de la Policía.
El comandante departamental de la policía, coronel Rolando Ramos, informó que después de intensos operativos realizados en el país, se logró su recaptura el 03 de mayo del 2012. Un día antes, la Fiscalía había recibido información de un oficial de la Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotráfico (FELCN) de Yucumo, quien dio referencias de la presencia de Cárdenas. Se confirmó la identidad a través de unas fotografías enviadas desde Sucre y se autorizó el operativo de recaptura.
Cárdenas, que cambiaba de vestuario al menos cinco veces por día, fue aprehendido cerca de la vivienda de su madre en Yucumo y no presentó ninguna resistencia al momento de su detención, afirmó el fiscal de distrito, Weimar Guzmán, quien dirigió todos los operativos en el último mes. Cuando fue arrestado, Cárdenas tenía puesta una gorra y según Ramos, estaba más flaco por sus constantes recorridos. La policía lo trasladó hasta la cárcel de Chonchocoro, donde seguirá cumpliendo su condena de 30 años.
Reflexiones de un criminal
“No importa lo que haga uno, ni que te perdonen, sólo necesita perdonarse uno. A los jóvenes quiero decirles que no se metan en las drogas, el camino a la delincuencia puede ser lindo un rato para divertirse y tener dinero, pero tiene sus consecuencias”, palabras de Jaime Cárdenas, tras su captura
Edda Pujadas / Twitter: @epujadas