Iliana Oropeza, vocera de Agua de uno de los edificios del urbanismo Hugo Chávez, comentó que el sistema implementado en la planta de tratamiento permite procesar las aguas servidas con una alta eficiencia y sin uso de energía, a través del uso de medios biológicos y naturales.
“Esas aguas residuales que genera la ciudadela se tratan de manera tal que quedan 90% libres de contaminación, que pueden verterse directamente al río Cocorotico o usarse para regar cultivos”, apuntó Oropeza.
El gobernador Julio León mencionó que la planta fue desarrollada por la empresa socialista Construcciones Yaracuy, con recursos aportados por el Ministerio para el Ecosocialismo, Hábitat y Vivienda, luego que el presidente de la República, Nicolás Maduro, los aprobara en una jornada de Gobierno de Eficiencia en la Calle.
Resaltó que la obra es ejemplo de la eficiencia del socialismo, toda vez que el proyecto estaba contemplado a ejecutarse en 11 meses y se concluyó en siete.
Además, los recursos excedentes o utilidades que obtuvo la empresa con la construcción de la obra, cerca de seis millones de bolívares, se destinarán al Fondo de Fortalecimiento del Poder Comunal para el desarrollo de proyectos comunitarios o a la ejecución de otras obras de interés colectivo.
“Esta es la eficiencia socialista, que distribuye los recursos al pueblo, no con la lógica capitalista, que acumula riquezas sólo para unos pocos. Esto es parte del legado del gigante Hugo Chávez que hoy vemos plasmado en obras como estas”, subrayó León.
El mandatario estadal anunció que se prepara un proyecto macro de una planta de tratamiento que recibirá las aguas residuales de los municipios San Felipe, Independencia y Cocorote, además de la que ya está en construcción en Chivacoa, Bruzual, que tiene el doble de la capacidad de la recién inaugurada en la ciudadela Hugo Chávez.