Se siente afortunado porque a través de los años, la vida le ha permitido hacer lo que le gusta y lo que es mejor, compartirlo con niños, niñas y adultos
«Para ser un cultor hay que ser un investigador». Es así como Gerardo Crespo define su quehacer. Desde hace 5 años se dedica oficialmente a ser promotor cultural, pero fue durante su vida escolar que descubrió su amor por el mundo artístico.
Se siente afortunado porque a través de los años la vida le ha permitido hacer lo que le gusta y lo que es mejor, compartirlo con niños, niñas y adultos. Hoy en día es un trabajador activo de la Dirección de Cultura de Plaza, al tiempo en que asume parte de las coordinaciones en el Centro Cultural de la zona 6 de la urbanización Los Naranjos de la ciudad mirandina de Guarenas y en planteles se la zona.
«No hay que
ser conformistas»
Gerardo Crespo tuvo un año productivo en 2014. Al tiempo en que dictaba talleres de artes plásticas, se encargó de preparar a estudiantes de los distintos planteles de la zona en lo que tiene que ver con manifestación culturales mirandinas, entre las que destacan San Pedro de Guarenas y Guatire y San Juan, Diablos de Yare y Zaragoza.
«Se trata de una formación folklórica muy completa. No hay que conformarse con montar un baile y cumplir con un objetivo; poner a grupo de niños a bailar para salir del paso. Para mi se trata de ubicarlos, explicarles de dónde nace, de dónde viene esa manifestación y que a la misma se le deba el respeto que merece. De ese modo los muchachos, y no sólo ellos, sino también los adultos, se sienten identificados con lo que hacen y saben dónde están parados.
Conocen su idiosincracia y por ende hay más sentido de pertenencia. Por eso el promotor cultural debe ser un investigador constante, que transmita sus conocimientos como son», manifestó Crespo.
Actualmente, en la zona 6 de Los Naranjos en donde funciona el centro cultural, Gerardo dicta talleres de piñatería de 1:00 a 4:00 de la tarde. En la mañana se dedica a preparar a los estudiantes del colegio Laudelino Mejías en la realización de disfrases hechos con material reciclable. Colaborará en la elaboración de la carroza de Carnaval de Los Naranjos.
Proyectos a corto plazo son muchos, pero se avecina la preparación de talleres sobre la Cruz de Mayo.
«Yo creo que al cultor de Guarenas más que cosas materiales le falta amor por lo que hace. El día que comencemos a querer y valorar lo que hacemos por encima de lo que nos hace falta, de verdad que las cosas cambiarán. Yo bailaba y disfrutaba del arte estando en bachillerato y sabía a que me dedicaría y amo esto, de verdad que lo amo», culminó Crespo.
Yohadi Arteaga
yohaarteaga@gmail.com