El gobernante venezolano, Nicolás Maduro (der), habla con el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, el lunes 2 de febrero del 2015.
El gobernante venezolano, Nicolás Maduro (der), habla con el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado
a decisión del capitán de corbeta venezolano Leamsy Salazar – quien llegó la semana pasada a Estados Unidos para testificar en un juicio federal que el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, es el jefe del Cartel de los Soles – ha colocado en estado de alarma al régimen de Nicolás Maduro, que ha procedido a prohibir que otros militares y empleados públicos viajen al país norteamericano.
Empleados públicos del gobierno venezolano, que hablaron bajo condición de anonimato por temor a perder sus puestos de trabajo de ser identificados, dijeron que las prohibiciones están dirigidas principalmente a dirigentes de las Fuerzas Armadas Venezolanas y a empleados de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).
“Si, es cierto”, dijo uno de los empleados públicos contactados. “Ya pasaron una notificación”.
En el caso de PDVSA, los trabajadores ahora deben sacar un permiso especial y justificar el viaje.
Pero tomar un avión rumbo a Estados Unidos quedó prohibido totalmente para muchos de ellos luego que Salazar aterrizara en suelo norteamericano para convertirse en testigo protegido de la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York.
Para el experto en materia de Seguridad, Esteban Gerbasi, la nueva prohibición denota el temor que el régimen de Maduro tienen de que otros funcionarios venezolanos con amplia información sobre las presuntas vinculaciones entre el chavismo y las operaciones del narcotráfico internacional terminen siguiendo el ejemplo del capitán de corbeta.
“La prohibición no solo es para empleados de PDVSA, es para todo los militares del país, para todos los altos funcionarios de los ministerios. Casi es para todo el mundo”, dijo Gerbasi.
“Desde la semana que llegó Leamsy Salazar, se activaron todas las alarmas y se les está restringiendo a todos los altos funcionarios y a sus funcionarios del régimen que viajen a Estados Unidos”, señaló.
Para poder viajar hay que contar con justificaciones muy serias para hacerlo, una situación de emergencia o algo muy grave. Por otro lado, el viajero debe mostrar que tiene pasaje de retorno y debe mostrar que no es acompañado por toda su familia, explicó Gerbasi.
“Les dicen: si tú vas a viajar, tu mujer y tus hijos se quedan aquí”, añadió.
El ex asesor de seguridad de la comandancia general del Ejército, Anthony Daquín, dijo que él tiene conocimiento de una serie de oficiales que tenían previsto viajar a Estados Unidos, algunos de ellos por razones de salud, y que tuvieron que suspender el viaje.
La situación incluso es más severa para oficiales de alto rango en puestos sensibles.
“El Ministerio de Defensa les solicitó a oficiales de alto rango que tienen cargos claves que tienen que poner el pasaporte a la orden del ministerio. Les están retirando el pasaporte”, dijo Daquín desde Nueva York.
Dijo que él conoce personalmente algunos de los oficiales que tuvieron que entregar el documento de identidad, particularmente aquellos que tienen visa para ingresar a Estados Unidos.
José Antonio Colina, presidente de la Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex), dijo que también ha recibido notificación sobre las restricciones de viaje dentro del sector militar.
“Oficiales activos que están ocupando cargos dentro de las fuerzas armadas han manifestado que les ha llegado por escrito radiogramas y memorándums donde se les prohíibe viajar a Estados Unidos, y en particular a estados como Florida”, dijo Colina desde Miami.
“Si son detectados que viajan, o si piden permiso para ir a algún tercer país para luego desviarse a Estados Unidos, son amenazados con ser sancionados e incluso el riesgo de que sean dados de baja”, dijo Colina, quien mantiene contacto con oficiales activos en Venezuela.
Salazar, un capitán de corbeta venezolano que fue el jefe de seguridad del fallecido presidente Hugo Chávez, llegó el lunes de la semana pasada a Washington para colaborar en una investigación de las autoridades estadounidense sobre las vinculaciones entre el chavismo y el narcotráfico.
Salazar, quien pasó gran parte de su carrera al lado de Chávez, llega a Estados Unidos como testigo protegido y podría brindar los detalles más devastadores presentados hasta ahora sobre el chavismo.
Según fuentes cercanas a la investigación, en su testimonio el capitán sostiene que la organización de narcotráfico conocida como Cartel de los Soles es dirigida por Cabello, quien actualmente es uno de los hombres de mayor poder dentro del régimen bolivariano.
“Este ha sido el golpe más duro que se le ha dado al chavismo. Este es el hombre que ha brindado todos los secretos. Fue el jefe de Seguridad y jefe de ayudantía de Diosdado Cabello, y fue el jefe de Seguridad de Hugo Chávez, jefe de su primer anillo de seguridad”, dijo una de las fuentes que habló bajo condición de anonimato.
“Él fue la persona de mayor confianza de Hugo Chávez, que se la llevó Diosdado después que se muere Chávez”, agregó la fuente, quien acompañó a Salazar en el vuelo que lo llevó a Washington.El Nuevo Herald