China ejecutó a un magnate minero declarado culpable de asesinato y de operar una organización al «estilo de la mafia», informó la prensa estatal el lunes.
Liu Han, de 48 años, expresidente de Hanlong Group, fue ejecutado junto a su hermano, Liu Wei, y tres socios, informó la agencia oficial de noticias Xinhua.
Los hombres se reunieron con sus familias antes de ser ejecutados, dijo Xinhua.
Los medios de comunicación estatales han vinculado a Liu con el exzar de seguridad Zhou Yongkang, el funcionario de más alto rango involucrado en la campaña anticorrupción de China.
Los intereses de Hanlong incluían la minería, los bienes raíces, la electricidad, la energía y las finanzas, y la compañía continúa como accionista en dos empresas australianas, Moly Gruop y Sundance Resources.
Liu fue detenido en 2013 junto con su hermano menor y fueron condenados a muerte en mayo de 2014.
Los hermanos Liu comenzaron a manejar casas de apuestas en su base en Guanghan, en la provincia suroccidental china de Sichuan, a principios de la década de 1990, y tenían a su alrededor «a una banda de matones y vagabundos locales», informó la prensa estatal en la época de su juicio.
El imperio de los hermanos creció, hasta que finalmente atrajo la atención de las autoridades centrales por un presunto tiroteo público en una casa de té en Guanghan, una tarde en enero de 2009, el cual fue supuestamente ordenado por Liu Wei y dirigido contra un rival del inframundo.
Liu Han también creó una reputación como filántropo, al construir instalaciones para una escuela rural después del terremoto de 2008 que devastó a Sichuan. Su hermano también tenía fama por su caridad, y había sido portador de la antorcha en la preparación para los Juegos Olímpicos de Beijing, también en 2008.