Rodríguez le exigió al gobierno de la monarquía española respeto para Venezuela, una república libre, soberana y democrática.
«Canciller García-Margallo, olvidó que ya los espejitos no son transables en esta tierra de libertad, patria de Bolívar y Chávez», contestó vía Twitter la canciller.
«Bastantes problemas tiene el Gobierno de España que responder ante sus ciudadanos y de los más necesitados que hoy mueren por no tener un techo donde resguardar sus esperanzas», señaló en referencia a los más 570.000 desahucios registrados por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca en España que han dejado sin hogar a miles familias.
Rodríguez cuestionó que el gobierno de la monarquía española rescate banqueros con dinero público, mientras se incrementa el número de suicidios a causa de los desahucios y más de 6 millones de hombres y mujeres están sin empleo.
«Se rescata a los banqueros con dinero público sin atender las necesidades esenciales de los más deprimidos socialmente», rechazó la canciller.
Indicó que Venezuela tiene la moral para ubicarse entre los países que ponen los derechos de la ciudadanía por encima de cualquier interés.
«Muchas lecciones tenemos para darle en materia social y en libertades y derechos esenciales», escribió en alusión a los logros del Gobierno Bolivariano que por la vía del socialismo generó más 3 millones de empleos que llevaron al mínimo la tasa de desocupación en Venezuela.
«Le sugiero, Canciller, que de una mirada por esos asuntos en lugar de rendir pleitesía a la tiranía mediática que pretende doblegarnos», agregó Rodríguez, en referencia a la campaña internacional contra Venezuela que utiliza medios de comunicación y voceros de derecha para difundir mentiras sobre el país.
«Que les quede claro, al club de amigos del torcedor de brazos, que andan con declaraciones insulsas sobre nuestra Patria ¡Venezuela se respeta!», aseveró.
Recientemente, el presidente de Estados Unidos, Barack Omaba, admitió en una entrevista al portal estadounidense Vox que su gobierno «en ocasiones tuerce el brazo a los países cuando no hacen lo que queremos».
La entrevista se divulgó un día antes de que el presidente Nicolás Maduro informara al país sobre la desarticulación de un atentado golpista que iba a ser ejecutado por un reducido grupo de oficiales de la Aviación Militar que tenían como propósito bombardear la sede de la presidencia de Venezuela y sedes de poderes públicos, ubicados en Caracas.
El plan fue planificado por partidos de la ultraderecha fascista en Venezuela, con apoyo de Estados Unidos, denunció el Presidente Maduro.
En el año 2002 el pueblo y el gobierno de Venezuela derrotaron un golpe de Estado organizado por partidos de derecha venezolanos apoyados también por Estados Unidos y el gobierno del Reino de España.