Los familiares ignoran en qué circunstancias ocurrió el suceso. Solo saben que Enrique Álvarez (20), salió para una celebración; a la una de la madrugada les avisaron que “se formó una plomazón” y que resultó estaba herido de dos balazos
En el hospital Domingo Luciani, de El Llanito murió Enrique Álvarez (20), quien resultó herido la madrugada del domingo en una fiesta celebrada en el sector La Barraca, barrio La Bombilla, de Petare, donde falleció el mismo día un adolescente de 15 años y hubo más de 10 heridos.
Álvarez era albañil y pintor de brocha gorda, vivía dos cuadras más abajo y dejó una niña de pocos meses de nacida.
Los familiares ignoran en qué circunstancias ocurrió el suceso. Solo saben que Álvarez salió para una fiesta, a la una de la madrugada les avisaron que “se formó una plomazón” y estaba herido.
En el hospital del Llanito lo atendieron. Tenía un tiro en el estómago y otro en el mentón, fue operado, pero el miércoles expiró.
En el mismo hecho murió el menor Yeinfinger Ramírez, de 15 años, y los heridos fueron llevados a distintos centros de salud como CDI y hospitales.
Los homicidas llegaron en un vehículo rústico, color blanco, con vidrios ahumados y abrieron fuego indiscriminadamente.
Niegan la versión
de enfrentamiento
Luís Armando Perdomo negó que su hijo Luís Alejandro Perdomo (32) se hubiera enfrentado con la policía en el sector Nueva Casarapa, de Guarenas, estado Miranda, el pasado martes.
La versión policial indica que un funcionario del Cicpc llegaba a su residencia, cuando fue sorprendido por dos hombres en moto, que intentaron asaltarlo y se registró el enfrentamiento, muriendo un joven de 16 años y después Perdomo este miércoles mientras estaba recluido en El Llanito.
Su padre, quien tiene 30 años laborando en el Seguro Social, donde es asistente de radiología, se quejó por la falta de atención, primero en el Seguro Social de Guarenas, donde no había una camilla para trasladarlo al Domingo Luciani y lo tuvieron que llevar acostado sobre una colchoneta. En El Llanito tuvieron que comprar hasta los tubos de ensayo.
Perdomo asegura que su hijo fue a Nueva Casarapa a buscar a su esposa que estaba trabajando como fisioterapeuta particular.