el nivel que alcanzó el año pasado antes de empezar a desplomarse por un exceso de oferta y el debilitamiento de la demanda.
En noviembre pasado, el miembro más influyente en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Arabia Saudita, persuadió a sus socios a mantener sin cambios la cuota de producción para defender su participación de mercado y desalentar el bombeo de naciones con mayores costos de extracción como Estados Unidos.
La medida aceleró la caída de los precios del crudo a un mínimo de cerca de 45 dólares.
“Creo que es difícil alcanzar nuevamente el nivel de 100 a 120 dólares”, dijo Madi en una conferencia de energía en Riad.
Los precios del petróleo se recuperaron desde enero a alrededor de 60 dólares el barril, pero han caído en los últimos días tras reportes de inventarios mayores a lo esperado en Estados Unidos que avivaron la preocupación en torno a un sobreabastecimiento en el mayor consumidor de combustible del mundo.
Las compañías petroleras, incluyendo los productores de petróleo de esquisto en Estados Unidos, han recortado sus gastos y eliminaron puestos de trabajo desde el hundimiento de los precios del barril, y podrían tener que aplicar otra ronda de disminuciones de costos para conservar efectivo y sobrevivir al declive del mercado.
“No estamos en contra de nadie ni rechazamos la producción de crudo de esquisto de Estados Unidos. Por el contrario, le damos la bienvenida porque aporta equilibrio en el largo plazo”, destacó Madi.
Los precios del referencial Brent <LCOc1> cerraron el viernes en 55,32 dólares el barril.
Madi reiteró que Arabia Saudita no tenía motivaciones políticas en sus medidas relacionadas con el petróleo.
“Entendemos que todos los países necesitan más ingresos (…) Queremos mayores ingresos, pero queremos más ingresos para nosotros y las futuras generaciones”, sostuvo.
“No hay una dimensión política en lo que hacemos como Ministerio del Petróleo, nuestra visión es comercial y económica. No quisimos perjudicar a nadie, nuestro enfoque es el siguiente: los productores que tienen menores costos tienen la prioridad para producir, pero quienes enfrentan mayores costos tendrán que esperar su turno”, aseveró.
El ministro del Petróleo saudí, Ali al-Naimi, ha dejado en claro que no votará por recortar la producción de la OPEP a fin de impulsar los precios. Reuters