El 16 de abril del año 2013 unos 200 motorizados armados intentaron quemar la sede del rotativo La Región, con el personal dentro del edificio. A dos años del ataque sufrido por afectos al Gobierno Nacional, aún los culpables siguen en la calle .
Daniel Murolo, jefe de redacción de este medio de circulación regional refiere que tanto la Fiscalía del Ministerio Público de Miranda, así como los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) le han restado importancia al hecho aún cuando la Fiscal General de la República Luisa ortega Díaz, ha reiterado constantemente sobre los hechos ocurridos tras las elecciones presidenciales del 14 de abril del 2013.
“Simplemente la fiscal general obvia la agresión sufrida por nosotros porque sabe que los agresores estaban plenamente idenficados con el chavismo, brazaletes tricolor y camisas rojas y que lanzaron bombas molotov a la sede del periódico, siendo claramente un delito de homicidio en grado de frustración contra las 12 personas que nos encontrábamos en la sede”, dijo.
Como se recordará ese martes, tras una marcha convocada por el líder opositor Henrique Capriles hacia la sedes de las Oficinas Regionales Electoral de cada ciudad se suscitaron una serie de hechos violentos en la capital mirandina, orquestada por sujetos afectos al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
“En los videos de seguridad que entregamos a la policía científica se observan claramente los rostros de quienes nos atacaron, en gran mayoría trabajadores de la Alcaldía del municipio Guaicaipuro –en esa oportunidad aun bajo la gerencia del exalcalde Alirio Mendoza- así como trabajadores del Consejo Legislativo regional, entre quienes estaba el actual director de seguridad de ese ente regional”, recordó Murolo.
“Meses después conocimos de fuentes ligadas al Cicpc que la orden de ‘arriba’ era guardar nuestro caso, porque los culpables eran funcionarios oficialistas”, dijo el jefe de redacción.
Los periodistas de La Región, colocaron en las redes sociales una fotografía donde se veían a los sujetos identificados con franelas rojas y el tricolor en el brazo izquierdo dañando la fachada de la casa de la cultura y esto desató la “furia” de los sujetos quienes acudieron y rodearon la sede del rotativo y con bombas molotov, piedras y cohetones dañaron la fachada. Una de las bombas molotov entró por una venta y quemó la oficina de la directora ejecutiva y del Director General del diario, quien para la fecha se encontraba de viaje fuera del país.
“Al día siguiente colocamos ante todos los organismo las denuncia del ataque, consignamos fotos, videos de todas las cámaras de seguridad y aun cuando identificamos con nombre y apellido a los promotores del ataque aún están en la calle y ni siquiera fueron llamados a declarar. Simplemente archivaron el caso”, dijo.
Para Murolo, el periodismo a través de las redes sociales ha sido una vía de escape a la censura impuesta a los Medios de Comunicación a través de la compra de periódicos, televisoras y a través del pago de grandes sumas de publicidad a cambio de titulares y de noticias que no “hieran susceptibilidades en el Gobierno Nacional así como escondan la realidad que día a día sufre el venezolano”, dijo.
Pola Del Giudice Ortiz / La Región