El fiscal general de Colombia, Eduardo Montealegre, se pronunció nuevamente este jueves sobre el ataque, que se produjo antes de la medianoche del miércoles, cuando la mayor parte de los soldados dormía.
El fiscal lo calificó de un «crimen de guerra», prohibido por el derecho internacional humanitario, argumentando que los rebeldes usaron artefactos explosivos no convencionales.
«La investigación está dirigida a establecer si las circunstancias de tiempo, modo y lugar constituyen un homicidio de persona protegida u otro crimen de guerra. »
El presidente Juan Manuel Santos volvió a condenar el ataque y durante un congreso en Cartagena reflexionó: «Qué difícil no morirse de rabia cuando uno ve a esos soldados asesinados por las FARC». Y después agregó: «Está bien sentir la rabia; pero canalizar esa rabia hacia soluciones productivas».
Santos anunció este miércoles la decisión de reanudar la ofensiva militar contra las FARC, luego de haberla suspendido por un poco más de un mes.
El mandatario visitó también a los militares heridos que fueron trasladados a la ciudad de Cali.
La respuesta de las FARC
La guerrilla de las FARC respondió a través de Pablo Catatumbo, uno de sus negociadores en La Habana.
Según Catatumbo, el ataque es la respuesta al asedio militar que vive la guerrilla.
«En Colombia, desde que comenzó la guerra, están bombardeando… ¿y acaso ha servido para algo? Solo para aumentar los muertos», dijo el guerrillero.
El presidente Santos había ordenado la suspensión de los bombardeos a los campamentos de la guerrilla el mes pasado como un gesto de buena voluntad por la tregua unilateral e indefinida declarada por las FARC en diciembre.CNN