Durante este fin de semana fueron ingresados 26 cadáveres a la morgue de Bello Monte, entre estos ocho procedentes de dos cuádruples asesinatos que se registraron en Caracas, uno en el municipio sucre y otro en el municipio Libertador.
En el sector La Colina de Telares de Palo Grande, en Caricuao fueron ultimadas cuatro personas durante un presunto escenario de venganza. Una de las víctimas fue Luis Enrique Molina Rojas, de 23 años, quien resultó muerto cuando al enterarse del tiroteo acudió en ayuda de un amigo.
Los otros muertos fueron Elio Arcia, de 28 años; Jesús Bello y José Antonio Núñez Blanco. Los tres últimos se encontraban en una fiesta que había en la zona y que según testimonio la realizan cada fin de semana para cobrar la venta de licor.
A eso de la 1:00 de la madrugada se prendió el tiroteo cuando una banda llego al sitio en busca de Arcia, a quien presuntamente señalaban de ser responsable del homicidio del padre de uno de sus integrantes.
Jesús Bello era su hermanastro y cuando lo vio caer, fue a socorrerlo junto a Núñez, también acudió Molina quien salió de su casa ignorando la súplica de su madre para que no se asomara.
Los asesinos intentaron prender fuego al cuerpo de Arcia y amenazaron con ejecutar a todo aquel que se acercara a tratar de ayudarlo. Los cuerpos estuvieron tendidos en el sitio hasta diez horas más tarde, cuando finalmente pudo acudir el Cicpc a levantarlos.
AA
