En el interior de su vehículo Chevrolet Optra azul quedo el cadáver de Darwin Antonio Caldera, de 39 años, cuando un disparo que entró por el vidrio del parabrisas le quitó la vida, adyacente a la redoma de Turumo.
Era conductor avance de la línea Feria de Buhoneros de Turumo y a las 6:00 de la mañana del domingo salió de casa a buscar su vehículo que saco del estacionamiento para ir al lugar donde guardaba la unidad con la que pensaba ir a laborar.
A 300 metros de su domicilio recibió el disparo. Se presume que intentaron asaltarlo porque la puerta del piloto estaba abierta cuando los vecinos lo hallaron muerto. La víctima vivía con su esposa y dos hijos, de 16 y 3 años de edad, respectivamente.
Ayer en la morgue sus familiares hablaron de su sucedido. Cuando se enteraron el hombre yacía muerto en el lugar.
Una amigo de la familia, Ricardo Ortiz, conto que la víctima era de Falcón y se estableció en Caracas buscando mejoras de vida. Tenia unos 15 años en la capital. «Una persona trabajadora, dedicado a su familia y a sus hijos.
Le hago un llamado al presidente Nicolás Maduro para que saque a los militares a la calle porque esta bueno de tanta inseguridad, de tantas familias sin padres», dijo.