El expresidente del gobierno español, Felipe González, mantiene la idea de venir a Venezuela pese a ser declarado persona non grata por la Aasamblea Nacional.
En entrevista pa Unión Radio, González destacó que no es diplomático a pesar de tener un pasaporte por su condición de expresidente.
Aunque desea venir, espera que no se produzca una situación de crisis” por su presencia y aseguró que su intención es que los denominados presos políticos recuperen sus derechos legales.
“En democracia hay que respetar la opinión libre de los que están con el gobierno y de los que no. Quiero tener la oportunidad de ver a los presos en la cárcel y de asistir al juicio oral”.
“Si no puedo ir a Venezuela abordaremos el caso ante instancias internacionalesMe preocupa una situación como la que está viviendo Venezuela que puede agravarse”.