Una inspección llevó a cabo este viernes la ministra de Servicios Penitenciarios, Iris Varela, en el Centro Nacional de Procesados Militares (Cenapromil), ubicado en el sector Ramo Verde de Los Teques, estado Miranda, con el propósito de evaluar las condiciones del recinto para proceder a la recuperación física de los espacios.
«Esta inspección, realizada en coordinación y a solicitud del director del recinto, coronel Dagoberto Hurtado García, arrojará un diagnóstico integral para comenzar a implementar los planes y asumir como autoridad única en esta materia para la atención de los privados de libertad, bien sean civiles o militares, a quienes previamente se les hizo la caracterización manual y cuyos datos reposan en los archivos administrativos del ministerio, así como revisar las condiciones físicas del lugar que mayormente presenta deterioro en pintura», explicó.
Luego de la evaluación se implementará el plan de trabajo bajo las cinco líneas estratégicas del Ministerio de Servicios Penitenciarios, cuyo fin es desarrollar un plan de acción que permita dejar en condiciones óptimas los recintos penitenciarios del país.
También se realizará una evaluación médica a los reclusos por parte de médicos del ministerio y así decidir el otorgamiento de medidas humanitarias a algunos de los 83 privados de libertad, de los cuales 68 son militares y 15 civiles. Durante la visita también se evaluaron las necesidades e inquietudes de los reclusos para implementar los programas de recreación, cultura y deporte que impulsa el organismo en todos los centros penitenciarios del país.
Transformación penitenciaria
Con esta inspección se da cumplimiento a la Gran Misión A Toda Vida Venezuela, que expone en su vértice 3 la transformación del sistema de justicia penal y mecanismos de resolución de conflicto y en su vértice 4 la transformación del Sistema Penitenciario.
«Estamos convencidos de que el trabajo que venimos realizando para la atención de los privados de libertad, bien sea adultos o adolescentes, con los métodos que se han diseñado para garantizar los derechos humanos, actividades de esparcimiento y cultura, alejará de la delincuencia y la criminalidad a las personas que están dentro del sistema», destacó Varela.
Señaló que el Gobierno Revolucionario ha demostrado que la implementación de métodos humanistas dentro de las cárceles funcionan y permiten cumplir con la tarea de corregir «los antivalores que produjo el capitalismo durante la IV República, cuando se maltrataba a los reclusos».
«En un año que tiene el ministerio se han aplicado distintos métodos de atención al ser humano y medidas humanistas. Como ministerio nos corresponde cumplir con el quinto vértice de la Misión A toda Vida Venezuela, de generar condiciones para ganarle la pelea a la violencia dentro de las cárceles. Estamos convencidos que trabajando la transformación del ser humano que se encuentra recluido en estos espacios se esta contribuyendo para que el problema de la criminalidad vaya disminuyendo y forme parte de un pasado que el pueblo venezolano está llamado a superar», precisó.
Destacó el buen funcionamiento de las unidades de producción para incorporar a los reclusos a programas de esparcimiento, recreación, cultura y deporte, pues ya cuentan con 22 panaderías, 14 herrería y 14 carpintería y peluquerías en los centros penitenciarios del país «con la finalidad de combatir el ocio en esos espacios».
La inspección contó con la participación de la directora de salud integral del Ministerio de Servicios Penitenciarios, Teresa Ortega; el defensor público y militar de brigada, Henry José Timaure; el director del Cenapromil, coronel Dagoberto Hurtado García, así como ingenieros y arquitectos del Fondo Nacional de Edificaciones Penitenciarias.
AVN