La policía rescató con vida a un bebé que había sido enterrado en una tumba poco profunda en una colina de la provincia de Guangxi, al sur de China, según los medios estatales de ese país.
Según información reportada por medios locales se cree que el bebé había sido abandonado desde hacía 10 días, pero los detalles del aterrador hecho aún se desconocen.
La familia del pequeño decidió abandonarlo porque nació con labio leporino y defectos congénitos, de acuerdo con la agencia de noticias Xinhua. En China, miles de infantes con defectos de nacimiento son abandonados.
CNN no pudo verificar los detalles los detalles del hecho de manera independiente, ya que la policía de ese país y el buró de asuntos civiles, que se encargan del cuidado del bebé, se negaron a hacer declaraciones a la prensa internacional.
El bebé fue dejado para que muriera: policía
El bebé nació el 20 de abril y fue dado de alta cuatro días después de recibir tratamiento por fiebre alta, de acuerdo con funcionarios del hospital de Tiandong.
“Normalmente los padres le piden al hospital que les dé un certificado de nacimiento y arreglos para el seguro médico, pero esta familia no quiso el certificado y salió inmediatamente del hospital después de pagar la cuenta”, le dijo Wu Weili, subdirector de pediatría del hospital, a la agencia de noticias Xinhua.
“No sabemos que fue lo que pasó exactamente durante el periodo de tiempo que el bebé fue dado de alta del hospital el 24 de abril y cuando fue reingresado de nuevo el 4 de mayo”, dijo Weili.
El 24 de abril la familia, incluyendo la abuela del menor, contrató a un hombre por 290 dólares para deshacerse del bebé, según Xinhua.
Ese día, el hombre dejó al recién nacido en una caja de cartón a la intemperie para que muriera. Dos días después, lo enterró, dice el reporte de Xinhua.
El rescate llegó cuando una mujer que estaba recogiendo hierbas en la ladera escuchó los lloriqueos. Con la ayuda de habitantes del sector, la policía rescató al bebé y lo llevó al hospital.
Wu dijo que el bebé estaba en condición crítica cuando llegó al hospital: tosía barro y su cuerpo estaba cubierto de rasguños y moretones.
El bebé pesó 7.8 libras cuando nació. Para cuando fue rescatado su peso era de 5.9 libras, es decir que perdió un total de 1.9 libras durante sus calvario.
“Es realmente increíble”, dijo el subdirector del hospital sobre la sobrevivencia del infante.
Los padres quieren al bebé devuelta
La policía arrestó a cinco personas incluídos ambos padres y las abuelas del menor, así como el hombre contratado por la familia para que matara al bebé. Los padres fueron puestos en libertad bajo fianza y ahora buscan la custodia del niño.
Escribieron una carta de disculpas, prometiendo que no lo lastimarían, reportó Xinhua.
“Nos preocupa que los padres del bebé puedan volver a lastimarlo”, le dijo a la agencia de noticias china Zhou Liying, director del buró de asuntos civiles del país. “Aún sabiendo que no lo harán, esta tragedia rondará la familia y afectará la salud mental del niño”.
El pequeño está siendo atendido en estos días para que recupere su salud, mientras que los doctores dicen que puede ser dado de alta a finales de esta semana. El gobierno local dice que el bebé podría ser puesto a cargo de la protección de servicios sociales.
Los padres y los abuelos del niño visitaron el hospital para ver al bebé por primera vez por primera vez el martes.