El padre de los primeros sextillizos de Costa Rica, José Francisco González, afirmó que está “contento y emocionado”de que sus cuatro niños y dos niñas estén estables de salud y añadió que todos serán “millonarios en amor”.
Emma, Valentina, Tomás, Diego, Andrés y Gabriel nacieron la noche del domingo en un lapso de seis minutos bajo la condición de prematuros, a las 27 semanas y cinco días de gestación, por lo que los seis están en incubadora y cinco de ellos intubados, pero estables.
“A ellos les falta mucho cariño y amor, creo que con el de nosotros va a estar sobrado, van a ser millonarios en amor. En la parte económica mi esposa y yo somos muy trabajadores y muy dedicados, no les va a faltar nada y yo digo que sí se puede”, dijo González a periodistas.
Añadió que cuando se casó con su esposa, de 34 años, pensaron en tener dos hijos; primero uno y a los años el siguiente, pero, añadió, las cosas no siempre salen como se planean. “Dios nos mandó seis y estamos muy felices, la historia cambia. Nos tocó esto y estamos muy contentos”, dijo.
Pese a la emoción, el padre se encuentra muy pendiente de cómo evolucione la salud de los seis bebés, ya que necesitan ganar peso y que se les terminen de desarrollar los pulmones porque se encuentran inmaduros, explicaron los médicos a cargo.
Los primeros sextillizos de la historia de Costa Rica nacieron en el Hospital México, ubicado en San José, mediante una cesárea realizada a la madre.
“Todo va a depender de la evolución de los niños. Necesitamos que aumenten de 20 a 30 gramos de peso por cada día y eso sucederá en tres o cuatro semanas. Intentamos que la nutrición sea la mejor, por eso se les da proteínas, carbohidratos y grasa”, expresó en conferencia de prensa la neonatóloga Patricia Fallas.
Tres de los bebés están ingresados en el Hospital México, una en el Hospital de la Mujer, otro en el Hospital San Juan de Dios y otro en el Hospital Nacional de Niños, según el protocolo establecido por la estatal Caja Costarricense de Seguridad Social.
“Queríamos llevar a los niños a las 28 semanas y dos días, pero nacieron de 27 y cinco días. Sabíamos que ella podía empezar con contracciones o con dolor en el útero, y eso no se podía postergar. Teníamos toda una logística elaborada para el momento. Hubiéramos querido que no fuera una emergencia“, aseveró Fallas a Efe.
Un total de 21 especialistas de cinco centros hospitalarios atendieron el parto múltiple y cada niño contó con un equipo que se encargó de su salud.
El padre de los bebés, de 39 años, indicó que desde hace varios años intentaban tener hijos y como no era posible optaron por la inseminación artificial.
“Mi esposa hace dos años perdió un hijo, fue muy duro para nosotros, luego de ahí duramos dos años volviendo a intentar y no se dio la oportunidad, por lo que optamos por la inseminación, un método conocido en el país”, relató el padre de los sextillizos.
La primera en nacer fue Emma a las 21:38 hora local y pesó 1.030 gramos, dos minutos después nació Tomás (1.060 gramos), la tercera fue Valentina (915 gramos), posteriormente Diego (980 gramos), Andrés (942 gramos) y el último fue Gabriel (984). EFE