EL CAIRO (AP) — La Iglesia Ortodoxa Copta de Egipto eligió el domingo un nuevo patriarca en una ceremonia llena de pompa y boato en la que un muchacho con los ojos vendados sacó el nombre del nuevo dirigente de entre las papeletas depositadas en un cáliz de cristal.
El obispo Tawadros, de 59 años, un ayudante del patriarca interino, tomará el nombre de papa Tawadros II, sucediendo al carismático Shenouda III, fallecido a principios de año tras permanecer 40 años al frente de esa rama del cristianismo.
Los tres obispos cuyos nombres figuraban en el cáliz eran considerados candidatos de consenso ajenos a la disputa tanto en el seno de la Iglesia como con otros grupos. Tawadros asumirá el papado en momentos en que los cristianos egipcios, el 10% de los 83 millones de habitantes, temen por su futuro ante el auge de los islamistas, que han tomado el poder tras el derrocamiento en el 2011 del dictador Hosni Mubarak.
La muerte del papa Shenouda III a los 88 años puso este año en primer plano el vacío de seguridad que aqueja a muchos de los fieles que durante la mayor parte de su vida fueron guiados por el venerado patriarca.
En una ceremonia televisada desde la catedral copta de El Cairo, el papa en funciones Pacomio depositó los tres nombres en un cáliz antes de oficiar misa. Un muchacho con los ojos vendados sacó el nombre del elegido por decisión divina, según la tradición eclesial.
«Oremos para que Dios elija al buen pastor», dijo Pacomio a los asistentes que abarrotaron la catedral.
La elección del nuevo papa comenzó hace varias semanas, cuando una comisión eclesial redujo la lista de candidatos de 17 a 5. El lunes, unos 2.400 miembros de la clerecía redujeron nuevamente la lista a tres, que incluía al obispo Rafael, de 54 años, ayudante de Shenouda, y el padre Rafael Ava Mina, de 70 años, un monje en un monasterio cercano a Alejandría y estudiante del papa que precedió a Shenouda.
Durante años, los egipcios cristianos dependieron mayormente de su Iglesia para proteger sus derechos, utilizando la estrecha relación de Shenouda con Mubarak.
Ninguno de los candidatos asistió a la ceremonia y permanecieron en sus respectivos monasterios. La agencia noticiosa estatal MENA dijo que los líderes eclesiásticos viajarán al monasterio de Wadi Natrun, al noreste de El Cairo, para felicitarle.
MIEDO A LOS ATAQUES
Haciéndose eco de las preocupaciones de muchos egipcios coptos, el tendero Michael George dijo antes del acto: «El miedo de los cristianos al gobierno islamista se debe especialmente a que su presencia puede animar a los radicales a actuar libremente».
Desde la caída de Mubarak ha habido varios ataques a iglesias por parte de islamistas radicales. Estos incidentes han alimentado las antiguas quejas de los cristianos, que dicen estar marginados en el ámbito laboral y en el legal, señalando a la legislación que hace más complicado obtener un permiso oficial para construir una iglesia que para levantar una mezquita.
Los Hermanos Musulmanes, el principal movimiento islamista del que proviene el actual presidente Mohamed Mursi, nombrado tras unas elecciones libres, ha prometido proteger los derechos de los cristianos en una nación con una amplia mayoría musulmana suní.
La plataforma política de los Hermanos, el Partido de la Libertad y la Justicia, felicitó a la Iglesia. El presidente del partido, Saad al-Katatni, dijo en su página de Facebook que era «optimista sobre la fructífera cooperación con el líder espiritual de los hermanos coptos».
Ana Batrwy / AP