Representantes del sector inmobiliario afirman que la caída en ventas del sector se debe a las restricciones y la falta de seguridad jurídica.
El presidente de la Cámara venezolana de la Construcción, Jaime Gómez Torres, propone que se liberen los topes de los créditos impuestos por el gobierno nacional para las viviendas. «Este tope en la actualidad está por una vivienda con ascensores en 1 millón 600 mil bolívares y unifamiliar sin ascensores 700 mil bolívares”.
“Cómo se puede construir una vivienda en 700 mil bolívares, sobre todo cuando se ha anunciado lo que una vivienda cuesta”, dijo Gómez en Unión Radio.
El presidente de la Cámara inmobiliaria de Venezuela, Aquiles Martini Pietri, estima que la clase media venezolana es la más afectada por la caída de los niveles de construcción de viviendas.
“Los 500 mil bolívares que se otorgan por Política habitacional hacen imposible que la mayoría de los venezolanos puedan adquirir vivienda”.
Para Martini el sector no cumplirá las metas de la Misión Vivienda de este año, lo que preocupa a todo el sector inmobiliario. “La meta de viviendas 2015, que es de 400 mil casas y por tercer año seguido caerá la construcción de viviendas”.