En el que se está convirtiendo en un año memorable para los novatos, Andrew Luck y Doug Martin llevaron la excelencia a un nivel récord. Luck rompió la marca de la NFL de yardas por pase para un novato en un solo partido al sumar 433 yardas para que los Colts de Indianápolis superaran el domingo 23-20 a los Dolphins de Miami.
El quarterback de los Colts terminó el día con 30 pases completos de 48 intentos, con dos touchdowns para romper el récord que Cam Newton impuso la temporada pasada con 432 yardas. Y lo logró el día en que el entrenador Chuck Pagano regresó al Lucas Oil Stadium por primera vez desde que fue diagnosticado con leucemia.
«Su presencia se siente todos los días en las instalaciones», dijo Luck. «Pero el hecho de verlo en persona, en los vestuarios, escucharlo hablar yo creo que le dio un impulso a los jugadores».
Luck, la primera selección general del draft, fue quien más lo mostró mientras Indianápolis (5-3) sumaba su tercera victoria consecutiva después de ganar solamente dos partidos la campaña pasada. Ha tenido cuatro juegos de al menos 300 yardas por aire, cifra que empata la de Peyton Manning (1998) como la máxima para un novato en una sola temporada.
«El chico sigue impresionando», dijo Reggie Wayne tras atrapar siete pases para 78 yardas. «Espero poder ayudar, ustedes saben, en este legado que está por crear».
Martin podría estar haciendo lo mismo para Tampa Bay (4-4). La primera selección de los Buccaneers impuso récord de franquicia con 251 yardas en acarreos y cuatro touchdowns en una victoria de 42-32 en Oakland —su ciudad natal. Anotó en acarreos de 1, 45, 67 y 70 yardas en la segunda mitad ante causaba daño a la que había sido una defensiva terrestre mejorada de los Raiders (3-5).
Martin, elegido en el lugar 31 general en abril proveniente de Boise State, se convirtió en el primer running back desde 1940 que anota tres touchdowns con carreras de por lo menos 45 yardas en un partido, de acuerdo con STATS LLC.
Cerca de 60 amigos y familiares de Martin atestiguaron la hazaña. «Todos estaban ahí. Fue increíble», dijo. «Es surrealista en este momento. Yo solamente hago mi trabajo. Me siento halagado».
Terminó a 45 yardas de empatar el récord para un solo juego que Adrian Peterson impuso con 296 en su temporada como novato en 2007 y se sumó a Mike Anderson, de los Broncos de Denver, como los únicos running backs con al menos 250 yardas por carrera y cuatro touchdowns en un partidos.
«Se ha convertido en un excelente jugador aquí en las últimas dos semanas», dijo el safety veterano de los Buccaneers Ronde Barber.
AP