La Policía española detuvo en Madrid a un preso de nacionalidad venezolana que el pasado mes de febrero no regresó a la cárcel tras un permiso penitenciario y que cumplía condena por el asesinato de un matrimonio británico en Alicante (este).
Según informó hoy la Policía española, el fugitivo fue interceptado en las inmediaciones del aeropuerto de Madrid cuando se disponía a recibir a una de sus hijas, quien también fue arrestada por presentar una denuncia sobre la falsa pérdida del pasaporte de su padre.
En septiembre de 2002 se denunció la desaparición de un matrimonio británico que se había desplazado a la costa del Levante español para adquirir una casa en la que vivir durante su jubilación.
La impresión de los investigadores es que ese matrimonio contactó con dos estafadores de origen venezolano, quienes les hicieron desplazarse hasta una localidad de Alicante (España) para supuestamente mostrarles un chalé.
Cuando el matrimonio llegó a la vivienda, los estafadores les quitaron el dinero en efectivo y tarjetas bancarias que llevaban y les encerraron en el sótano hasta que la Policía encontró sus cadáveres dentro de una zanja de metro y medio de profundidad, tapada y sellada con una capa de cemento de unos 25 centímetros.
Ambos detenidos fueron condenados a 59 años de prisión por la Justicia española.
En febrero de 2015 uno de estos estafadores recibió un permiso carcelario y no regresó al centro penitenciario, por lo que se iniciaron las investigaciones para localizarle y detenerle.
Días más tarde, una hija del fugado denunció en la comisaría de un municipio de Málaga (sur de España) el supuesto robo de un bolso en cuyo interior, entre otros efectos personales se encontraría el pasaporte de su padre.
Pero como el pasaporte le fue retirado durante el proceso policial y judicial al fugado, los investigadores sospecharon que éste podría tratar de documentarse para regresar a su país, Venezuela.
En el momento de su arresto, el fugitivo portaba diversa documentación falsificada. EFE