La misa se realizó en Caacupé, una pequeña ciudad de 48 mil habitantes, el principal bastión de la fe católica de Paraguay
CAACUPÉ, Paraguay — Ante cientos de miles de personas desesperadas por estar cerca de él, el papa Francisco ofreció ayer su primera misa en Paraguay, un país donde 90% de la población profesa la fe católica.
«Estar aquí con ustedes es sentirme en casa», dijo el Papa, el primer pontífice latinoamericano, al iniciar su homilía. La ceremonia religiosa que precedió a las palabras del papa incluyó rezos en guaraní, idioma indígena que junto con el español es oficial en Paraguay.
El papa rindió homenaje a la mujer paraguaya a la que calificó como «la más gloriosa de América».
«Quisiera referirme de modo especial a ustedes mujeres y madres paraguayas, que con gran valor y abnegación han sabido levantar un país derrotado, hundido, sumergido por una guerra inicua», dijo aludiendo a la guerra de la Triple Alianza.
En ese conflicto Paraguay se batió entre 1865 y 1870 contra Argentina, Brasil y Uruguay y su población adulta de hombres fue prácticamente aniquilada. La mujer paraguaya cargó sobre sus hombros la reconstrucción del país tras los combates.
Hoy ocho de cada 10 mujeres paraguayas no tienen seguro médico ni protección social ya que trabajan de manera informal. Según un informe de la organización no gubernamental Coordinación Latinoamericana de Mujeres el salario de las paraguayas equivale a 70% del de los hombres y un 32% está subempleada, mientras que el porcentaje en los hombres es de 25%.
La misa se realizó en Caacupé, una pequeña ciudad de 48.000 habitantes, el principal bastión de la fe católica del país. Allí, según cuenta la leyenda, hacia el año 1600 la virgen María le salvó la vida a un indígena guaraní cuando fue atacado por una tribu enemiga y éste, en agradecimiento, talló en madera una virgen morena que los paraguayos veneran hasta hoy.
Caacupé, que significa «detrás del bosque de yerba» en guaraní, se encuentra a 54 kilómetros al este de Asunción.
Cientos de miles de personas llegaron desde todos los rincones de Paraguay y países vecinos.
De interés
La visita del papa Francisco ha generado una enorme expectativa en un país donde 24% de la población vive debajo de la línea de pobreza, 14% no tiene empleo y 110.000 indígenas sobreviven en condiciones económicas y sociales paupérrimas