Ariel Agustín Figueroa Franquiz (52) regresaba de buscar a su descendiente en su trabajo en San Francisco de Yare, cuando fue interceptado por dos sujetos en una moto, quienes intentaron despojarlo de su automóvil
Un taxista fue asesinado a las 8 de la noche del pasado martes, en la avenida Perimetral de Charallave, a la altura del distribuidor Alvarenga, municipio Cristóbal Rojas, por antisociales que intentaron robarle su vehículo.
El infortunado respondía en vida al nombre de Ariel Agustín Figueroa Franquiz de 52 años de edad. El mismo tenía fijada su residencia en la tercera etapa de la urbanización Arichuna del municipio Cristóbal Rojas.
Se conoció que el hoy occiso salió de su casa a las 7 de la noche, a buscar a su hijo menor a la construcción donde trabaja en San Francisco de Yare, y cuando regresaban a su hogar, fueron interceptados en el mencionado trayecto vial, por dos sujetos armados que se trasladaban en una moto y pretendieron despojar al chofer de su vehículo marca Chevrolet, modelo Aveo, color gris plomo, 4 puertas.
El hombre, al percatarse de la situación, trató de frenar para entregar el carro, pero recibió varios impactos de bala, perdiendo el control del auto e impactando contra una de las defensas del distribuidor. Su hijo, que viajaba como copiloto, intentó auxiliarlo, pero observó que venían dos motorizados y se escondió por temor a que arremetieran contra él. Los antisociales no lograron llevarse el auto.
Los funcionarios del Eje contra Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) de los Valles del Tuy, levantaron el cuerpo sin vida y lo trasladaron a la morgue de Ocumare. Asimismo, iniciaron las averiguaciones de rigor.
Era un líder vecinal
Parientes de Figueroa Franquiz, señalaron que el trabajador se ganaba la vida como taxista en una línea que funciona en el Terminal del Nuevo Circo en la ciudad de Caracas. Además, era un reconocido líder vecinal, que trabajaba en pro de la comunidad.
El hecho conmocionó a los vecinos de Arichuna, quienes han realizado varias protestas para condenar los constantes robos e incidentes delictivos en el sector. “Tienen que pasar cosas como estas, para que los cuerpos policiales nos prometan mayor seguridad y como suelen hacerlo, vendrán dos semanas y luego se perderán otra vez”, expresó uno de los vecinos.
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