Más de 450 personas afectadas por el desbordamiento del río Boconó, en el estado Trujillo, han recibido atención médica desde el miércoles 8 de julio, cuando ocurrió la emergencia.
De acuerdo con las estadísticas de la Fundación Trujillana para la Salud (Fundasalud), unas 130 personas de diversas edades y género han sido atendidas por diversas patologías, mientras que cerca de 320 fueron vacunadas.
Para tal fin, Fundasalud ha instalado dos consultorios móviles y coordinado con la Misión Barrio Adentro y el Hospital Rafael Rangel de Boconó, para darles atención oportuna a los afectados.
Además, el equipo de Salud Ambiental adelanta planes de saneamiento destinados a evitar la proliferación de criaderos del mosquito Aedes aegypti, a fin de prevenir el dengue y la chikungunya.
Estas acciones han consistido en la fumigación, abatización de las aguas y eliminación de cachivaches y objetos que sirvan de criaderos.
El presidente de la institución, Segundo Urbina, refirió que cuentan con los insumos y material médico necesario para el debido abordaje de esta comunidad.
Asimismo, destacó el trabajo articulado que desarrollan diversas instituciones estadales para garantizarles, progresivamente, mejores condiciones de vida a estas familias.