La protagonista de Dawson’s Screek, Katie Holmes consiguió que la actriz se lleve uno de los peores looks de la semana. El vestido que escogió la ex de Tom Cruise para ir al supermercado no le ayudaba nada a sacar partido.
Al parecer, Katie Pero no solo tuvo un mal día en cuanto a ropa, pues a juzgar por su melena desaliñada y poco cuidada, quizá no cepilló su pelo antes de salir de casa.
La ex de Tom Cruise se encuentra en Nueva York grabando All We Had, la primera producción en la que, además de actuar, participa como directora, y por exigencias del guión se ha dejado ver sin una gota de maquillaje, un mini vestido de mezclilla poco favorecedor y una cabellera despeinada.
Un look totalmente opuesto al estilo elegante que tan bien ha aprendido de ella su hija, Suri Cruise.
Redactora: Vanity Fair / MG