Un hombre hizo realidad eso de “tierra de nadie”.
Las leyes ayudan a que los ciudadanos tengan mejor convivencia. Pero, ¿quién dice que no se puede estar bien sin normas generales?
Pues, Vit Jedlicka, un político checo, lo está demostrando tras fundar su propio país: Liberland, en el cual está aboslutamente todo está permitido.
¿Cómo lo logró?
Tras una investigación, Vik descubrió que en el centro de Europa, entre Serbia y Croacia, existían seis kilómetros que no pertenecían a nadie. Esto, producto del desplazamiento de la antigüa Yugoslavia que se dio en los años noventas, mediante el cual quedaran a la luz naciones que ahí habían existido, pero esta tierra pudo ser reclamada por su fundador gracias al principio “terra nullius” (tierra de nadie).
“Quería fundar un país distinto: donde se vivieran todas las libertades, fuera del alcance de las fuerzas políticas y que existe en otras partes del mundo como Singapur o Hong Kong, pero no en el centro de Europa”, le dijo Vit Jedlicka a BBC Mundo.
Desde el 13 de abril de este año, fecha de su creación, Liberland ha buscado ser reconocida como una nación ante organismos internacionales y otros países, pero no lo ha logrado. Por otra parte, países vecinos ya han tomado medidas para evitar algún tipo de problemas con sus habitantes.
Tiene su propia bandera, en la que se manifiestan los preceptos de libertad…
“El país se enorgullece de otorgar libertad personal y económica a sus ciudadanos, garantizada en la Constitución, que limita el poder de los políticos que no pueden interferir en las libertades otorgadas por la nación de Liberland”.
Como sabemos que se lo están preguntando, sí reciben solicitudes de residencia. Hasta los momentos llevan unas 360.000
¿Quién está dispiuesto a emigrar para ser libre?
