La guerrilla colombiana de las FARC anunció el jueves que mantendrá el cese unilateral del fuego que inició hace un mes e insistió en que la tregua debe ser bilateral para poder desescalar el conflicto y lograr un acuerdo de paz.
«Hay consenso nacional que ya no tiene validez dialogar en medio de las detonaciones y el ruido de los fusiles. Por eso no se entienden estas agresiones a una guerrilla en tregua que, como es lógico, las unidades guerrilleras están en el derecho de responder apelando a la legítima defensa», dijo en La Habana el jefe guerrillero Carlos Antonio Lozada.
«Ratificamos nuestra decisión de mantener el cese al fuego unilateral» y aunque no especificó el período exigió «una actitud correspondiente por parte del gobierno para que se pueda consolidar el desescalamiento del conflicto, hasta llegar al cese al fuego y hostilidades bilateral y definitivo que toda Colombia reclama».
Las FARC presentaron un balance del alto el fuego que las FARC iniciaron el 20 de julio. Indicó que las unidades guerrilleras fueron bombardeadas en dos oportunidades por las fuerzas del orden y que como consecuencia de esas acciones tres guerrilleros murieron, tres más están desaparecidos y otra fue capturada.
El presidente Juan Manuel Santos ordenó el 25 de julio suspender temporalmente los bombardeos contra los campamentos de las FARC.
El no estatal Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos publicó el jueves un informe en el que sostuvo que el período comprendido entre el 20 de julio y el 19 agosto fue el «mes con menor actividad violenta del conflicto desde 1974».
Sobre las denuncias de las FARC, sobre los supuestos bombardeos a sus campamentos, el Centro hizo hincapié en que son «hechos que están pendientes de verificación por parte de las autoridades».
AP